Ben Affleck tiene que dormir mucho para prevenir su migraña crónica

El actor Ben Affleck sufre migraña crónica a causa del estrés. Los ataques de migraña lo han obligado a interrumpir más de un rodaje y tiene que llevar unos estrictos horarios de sueño para prevenir las crisis.

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GTRES

Ben Affleck sufre migraña crónica a causa del estrés.

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

La imagen del actor Ben Affleck durmiendo en un barco durante su luna de miel tras casarse con Jennifer Lopez el pasado año suscitó muchos comentarios pero había una razón médica: el actor sufre migraña crónica. La migraña cursa en forma de ataques que pueden dejar fuera de juego al que la sufre obligándolo a retirarse a descansar. De hecho el actor ha tenido que interrumpir algún rodaje a causa de la migraña. 

La migraña es la tercera enfermedad más prevalente del mundo y la primera causa de discapacidad en adultos menores de 50 años, señalan la Sociedad Española de Neurología.

Se trata de un trastorno crónico que no tiene curación, aunque las crisis pueden prevenirse o aliviarse si se controlan los desencadenantes y se sigue el tratamiento adecuado.

Cómo funciona el cerebro de una persona con migraña

La migraña es una enfermedad neurovascular en la que el cerebro tiene dificultad para adaptarse rápidamente a los cambios bruscos y no es capaz de bloquear los sobreestímulos. Esto significa que, por ejemplo, un cambio brusco de temperatura o una situación de estrés puede provocar un ataque de migraña.

"Piensa en el cerebro como si fuera un ordenador con muchos programas abiertos en función de los estímulos que recibe. Llega un momento en que el cerebro se cansa, necesita reponer energía y para ello, volviendo al símil del ordenador, necesita resetearse. En un cerebro migrañoso ese reset se convierte literalmente en un ataque de migraña, mientras que en un cerebro no migrañoso puede traducirse simplemente en cansancio. Un cerebro no migrañoso no lo puede aguantar todo, pero no necesita resetearse de forma tan agresiva como un cerebro migrañoso", explicaba a Saber Vivir la Dra. Patricia Pozo Rosich, neuróloga y responsable de la Unidad de Cefalea del Hospital Universitario Vall d’Hebron.

Cómo es un ataque de migraña

La migraña es una enfermedad que cursa con ataques episódicos (empiezan y acaban), recurrentes e impredecibles. Las guías médicas establecen la división entre migraña crónica y migraña episódica según la frecuencia de las crisis, aunque ambas son crónicas en el sentido que no se curan. En la migraña episódica las crisis se suceden hasta 14 días al mes, y en la migraña crónica aparecen 15 o más días al mes.

Los ataques de migraña pueden durar entre 4 y 72 horas, aunque varía mucho de una persona a otra pero en todo caso no es un dolor de 15 minutos.

La migraña provoca un dolor de cabeza intenso y pulsátil que empeora con el movimiento y ante estímulos como la luz o el ruido.

La persona puede sufrir auras sensitivas (ver destellos de luz) o de lenguaje que pueden aparecer antes de las crisis o durante ellas.

El dolor puede ser tan incapacitante que muchas personas tienen que tumbarse en una habitación a oscuras y cerrar los ojos porque el más mínimo movimiento o la luz intensifican el dolor, que puede ir acompañado de náuseas y vómitos.

Qué desencadena los ataques de migraña

Son muchos los factores que pueden desencadenar un ataque de migraña. El estrés, el ayuno, los cambios atmosféricos, dormir poco,  las comidas copiosas o determinados alimentos, el alcohol, los cambios hormonales en la mujer... En el caso de Ben Affleck, se apunta al estrés como desencadenante.

Mantener estos factores bajo control, llevar unos hábitos de vida saludables seguir una dieta equilibrada, hacer ejercicio moderado y, sobre todo, respetar unas rutinas de descanso previene ataques de migraña. También es importante no abusar de los analgésicos y seguir el tratamiento recomendado por el médico.