El tiempo que llevamos de pandemia ha sido suficiente como para evidenciar que el número de casos y la mortalidad por Covid-19 varían muchísimo de un continente a otro, de un país a otro, e incluso de una región a otra.
Esto hace pensar que son muchos los factores que influyen en la propagación del virus:
- Culturales. Allí donde hay menos contacto físico, como en los países nórdicos, la incidencia del coronavirus es menor.
- Demográficos. Las zonas con mayor densidad de población tienen índices de cotagio más altos.
- Socioeconómicos. Esta pandemia está castigando especialmente las zonas pobres.
- Ambientales. Aunque no es un virus estacional, parece que su intensidad se reduce con el calor.
Ahora, investigadores del CIBER de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) en la Universidad de Girona, y del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA) del CSIC, han descubierto un posible factor más:
- La exposición a contaminantes atmosféricos puede aumentar la incidencia de la Covid-19.
Cuánto influye la contaminación
Para llegar a estas conclusiones que han sido publicadas en Environmental Research, los investigadores se centraron en áreas pequeñas de Catalunya (áreas básicas de salud de comarcas) entre el 25 de febrero y el 16 de mayo de 2020 y analizaron si la exposición a largo plazo a contaminantes atmosféricos aumentaba el riesgo de contagio y muerte de Covid-19.
Y los resultados fueron sorprendentes:
- "Encontramos que la exposición a largo plazo al dióxido de nitrógeno (NO2) y, en menor medida, a las partículas PM10 actuaban como predictores independientes de la propagación espacial de Covid-19", explica Marc Saez, jefe de grupo de Investigación en Estadística, Econometría y Salud (GRECS) de la Universidad de Girona y el CIBERESP.
El dióxido de nitrógeno es uno de los mayores contaminantes que existen en los entornos urbanos y está producido principalmente por los tubos de escape de los vehículos diésel
Las partículas PM10 son partículas sólidas o líquidas dispersas en la atmósfera y provienen de la contaminación que genera el tráfico o la industria, del polvo en suspensión o de las quemas agrícolas.
Dicho esto, los investigadores comprobaron que:
- Por cada aumento de PM10 por encima de la media, el riesgo de un caso confirmado de Covid-19 en un área básica de salud aumentó un 3%.
- Y por cada aumento de dióxido de nitrógeno por encima de la media, el riesgo de incidencia de Covid-19 se elevó en un 2,7%.
El estudio concluyó que la población de las comarcas que presentaban mayores niveles de exposición a estos agentes contaminantes tenía hasta un 35,7% más de riesgo de muerte por Covid-19 que la de las comarcas con menor exposición.
Otros factores aún más determinantes
Son varios los mecanismos biológicos que explican la asociación entre los contaminantes del aire y las infecciones virales respiratorias, ya sea la gripe o el SARS-CoV-2.
De hecho, se sabe que en las zonas donde hay mayores niveles de partículas contaminantes, las enfermedades respiratorias aumentan y son más frecuentes las visitas a urgencias como consecuencia de neumonías o exacerbaciones bronquiales.
Sin embargo, los autores insisten en que "la contaminación es solo una variable intermedia más en la propagación espacial de la Covid-19".
La densidad de la población, la vivienda deficiente y la movilidad de las personas es aún más determinante en la propagación del virus.
De ahí que debe insistirse en una correcta ventilación, higiene y desinfección de los espacios y, sobre todo, en frenar la movilidad de las personas si el riesgo de contagio es alto.