Jugar, apostar de vez en cuando, es un hábito social que practica una gran mayoría de la sociedad. Se estima que el 80% de la población adulta juega.
- Pero hay un nada despreciable 5% que tiene un comportamiento adictivo. No juega por mera diversión, sino que el juego les puede y afecta gravemente su vida.
EL NUEVO PERFIL DEL LUDÓPATA
El número de ludópatas no ha crecido significativamente. Pero lo significativo es que desde el 2010 ha cambiado el perfil.
“Hoy los ludópatas son diez años más jóvenes”, explica el profesor Carlos Villoria, doctor en Psicología y presidente de la Asociación de Psicoterapeutas para el estudio de las Adicciones (APEAP).
- Hemos pasado de que la edad media esté entre los 40-45 años a los 26-35 años. “Y eso es 100% atribuible a la aparición de los juegos en línea”, remarca el doctor.
- El ludópata es también mayoritariamente hombre (7 de cada 10), también porque la mayoría de los nuevos juegos adictivos, como las apuestas deportivas, atraen más a hombres.
7 de cada 10 ludópatas son hombres y la mayoría de apuestas deportivas
Los hombres se enganchan a los nuevos casinos en línea (el 30%) y sobre todo a las apuestas deportivas (el 55%), el resto son los tradicionales tragaperras y casinos.
- La ludopatía del bingo, en cambio, no ha cambiado. Es mayoritariamente mujer, de unos 50 años.
QUÉ DIFERENCIA UN LUDÓPATA DEL JUGADOR
A todos nos puede gustar jugar de vez en cuando. Hacer una apuesta, ir al casino con amigos o echar unas monedas no es una conducta preocupante, es lo que se llama ser jugador social y no reviste problema alguno.
Los ludópatas tienen unas características que los diferencia claramente del jugador social:
- No tienen control de su conducta. El juego les puede y no son capaces de parar, nunca encuentran el límite (ni de tiempo ni económico).
- El objetivo ya no es solo conseguir dinero: tienen una verdadera dependencia, Incluso afecta a su autoestima el no recuperar el dinero perdido.
- A diferencia del jugador esporádico, que lo vive como una actividad social y juega en compañía, el 95% de los ludópatas juegan solos.
- Pierden control del gasto. Un jugador se marca límites, el ludópata no sabe cuánto puede llegar a perder y en ocasiones las pérdidas son desmedidas.
- El jugador social en un porcentaje mayoritario (en torno al 70%) dejan de jugar en cuanto han ganado. El 95% de los ludópatas, si ganan, es un mero estímulo para seguir jugando y volver a perder esas ganancias.
¿CÓMO DETECTAr a un LUDÓPATA?
La familia puede detectar detalles que le hagan pensar que estamos ante un caso de adicción, sobre todo en este nueva fase en la que estamos hablando de gente joven, muchas veces aún sin ingresos fijos. Hay que estar atento a:
- Si la persona está teniendo exceso de gastos de forma repentina.
- Vigilar los pequeños hurtos que pueda haber en casa.
- Cambios radicales de personalidad. Por ejemplo, es habitual que una persona extrovertida, al entrar en la ludopatía se encierre más en su habitación.
Cómo desenganchar a alguien del juego
En la ludopatía, como en la mayoría de adicciones, se produce una falta de reconocimiento de que se es adicto.
“En ocho de cada diez casos es un familiar el que contacta con nosotros”, señala el doctor Villoria. El paciente no quiere venir.
En 8 de cada 10 casos el paciente se ve forzado a buscar ayuda, él niega el problema
El consejo del especialista es obligarlo a que acuda a la consulta.
- El chantaje económico o emocional es a veces necesario, puesto que la mayoría de ludópatas van a negar el problema.
¿TIENE RELACIÓN CON LOS VIDEOJUEGOS?
La ludopatía es la adicción a los juegos de azar y las apuestas. Tiene un componente económico.
Uno de los factores que determinan la adicción es la cercanía entre el juego y la consecución del premio. Por eso los juegos tragaperras y el bingo eran los más habituales y no tanto las loterías. Hoy, los juegos de apuestas en línea, también muy inmediatos son el nuevo reclamo.
- La adicción a los videojuegos existe y puede suponer un trastorno en los hábitos de vida del jugador, pero es otro tipo de patología diferente a la ludopatía, porque no afecta tan claramente a su economía.
No hay evidencia de una relación entre los videojuegos y la ludopatía
“No se ha demostrado claramente en estudios que haya una causa efecto entre los videojuegos y la adicción a los juegos de azar”, señala el doctor Villoria.
Sin embargo, es un hecho que a través del videojuego, que son conexiones en línea también, tienen ya una puerta abierta para poder engancharse a las apuestas.
¿CÓMO SE TRATA LA LUDOPATÍA?
El tratamiento lo decide el propio paciente. Los jóvenes suelen preferir el tratamiento grupal, que es más económico, aunque dura más.
- Las mujeres, que en mayor medida viven el problema con vergüenza, prefieren un tratamiento individual, que, por otra parte, suele ser más eficaz, pese a ser más caro.
“En lo que se refiere al precio, todo es relativo -aclara el doctor Villoria-. He tenido pacientes que en un solo día se gastaban jugando el equivalente a lo que les puede costar todas las sesiones de terapia necesarias para curarse”.
Se pueden hacer sesiones en grupo o individuales, según la preferencia de cada paciente
Hay cuatro técnicas básicas en el tratamiento:
- Control del dinero, para que ludópata no tenga libre acceso a él.
- Autoprohibición. El propio ludópata puede apuntarse en una lista para que le impidan acceder a las webs más habituales de apuestas y los casinos.
- Plan de devolución de deudas. Los créditos fáciles pueden haber dejado al ludópata en una difícil situación económica. Hay que organizar cómo se va a poder devolver.
- Cambio en la manera de pensar. El especialista ayuda con estrategias para que haya un cambio de actitud respecto al juego.
PREVENIR la ludopatía
“La familia puede hacer mucho educando a los jóvenes. Explicando la capacidad adictiva que tienen los juegos de azar”, recuerda el profesor Villoria.
Hay que estar atento a muchos detalles. No olvidar que la ludopatía puede hacer que la persona pierda horas de estudio o de trabajo, que afecten a su rendimiento.
A veces hay una patología de ansiedad o depresión que lleva al juego
- Puede aparecer nerviosismo por la necesidad de jugar y no estar preocupado pese a que haya una reducción significativa de su economía.
Por último, no hay que olvidar que detrás de la adicción al juego o a causa de la adicción puede haber otra patología. “El 30% de los ludópatas padecen también ansiedad o depresión”, explica el doctor Villoria.
En esos casos, es necesario un tratamiento combinado con el psiquiatra para tratar ese otro problema.