¿Hasta qué punto la hora en la que te tomas los medicamentos para controlar la tensión arterial puede influir en sus resultados? ¿Hay un momento mejor que otro para hacerlo?
Los investigadores del proyecto Hygia llevan mucho tiempo intentando dar respuesta a estas y otras preguntas, y lo hacen estudiando en profundidad la relación entre la cronobiología y el control de la hipertensión arterial.
A su anterior estudio, publicado también en el European Heart Journal, en el que afirmaban que el riesgo cardiovascular depende de los niveles de presión arterial que tenemos mientras dormimos, y no de los que se miden en consulta, se suma ahora una nueva evidencia centrada en los beneficios de tomar los fármacos antihipertensivos justo antes de acostarse.
Los datos son sorprendentes: en comparación con las personas que se toman las pastillas por la mañana, el riesgo cardiovascular se reduce hasta casi la mitad.
fármacos para la tensión y ritmos biológicos
El profesor Ramón C. Hermida, director del Laboratorio de Bioingeniería y Cronobiología de la Universidad de Vigo y que, además, es el responsable del informe, nos explica en esta entrevista hasta qué punto hallazgos como este pueden llegar a marcar un antes y un después en el abordaje de la hipertensión.
¿Podría explicarnos, brevemente, cómo se ha llevado a cabo esta investigación?
Durante una media de casi 6 años y medio seguimos a 19.084 pacientes hipertensos. Los dividimos en dos grupos: la mitad tomaban sus fármacos antihipertensivos al levantarse y la otra mitad antes de acostarse.
La presión arterial se sincroniza con el ciclo de actividad y descanso
Quiero puntualizar que se los tomaban justo en esos dos momentos, no por la mañana, ni durante el desayuno, ni a una hora fija de la tarde… No es lo mismo tomar la medicación a las ocho de la tarde que hacerlo a la hora de acostarse.
¿Y cuáles fueron los resultados?
Son tremendamente relevantes: el riesgo cardiovascular se redujo un 45% en quienes tomaron los fármacos por la noche, en comparación con los que lo hacían por la mañana.
La reducción fue también muy significativa según el tipo de trastorno. Así, por ejemplo, el riesgo de ictus disminuyó en un 49%, el de insuficiencia cardiaca en un 42% y el de infarto en un 34%.
Pero eso no es todo: también hemos comprobado que quienes usaban las pastillas antes de acostarse conseguían un mejor control de la hipertensión arterial con un número menor de fármacos. Además, sus niveles de colesterol LDL (el "malo") eran más bajos y los de HDL (el "bueno") más altos.
La investigación que publicaron el año pasado ya apuntaba que medicarse por la noche podía tener ventajas. ¿Han detectado ya un cambio de tendencia respecto a la hora de recomendar la toma de los fármacos antihipertensivos?
A nivel internacional las publicaciones que se han ido conociendo a lo largo de esta última década, no solo del proyecto Hygia sino también de otros grupos, sí han tenido ya un cierto impacto. En España hace aproximadamente 15 años apenas el 8% de los pacientes tomaban fármacos por la noche, y en este momento esas cifras están superando el 30%.
Desde nuestro punto de vista todavía no es lo idóneo, pero hay que tener en cuenta que cambiar la hora en la que se toma la medicación, sin que haya habido una monitorización ambulatoria previa, puede suponer ciertos riesgos.
En primer lugar, no sabemos realmente si ese paciente, para empezar, necesita tratamiento o no. Y en segundo lugar desconocemos su perfil de regulación de la presión arterial y cuáles pueden ser los posibles efectos adversos que podría tener el cambio en la hora de la medicación.
Si se quiere cambiar la hora de la medicación primero hay que monitorizar al paciente
Por ello, en los centros de salud y hospitales de Galicia que trabajan dentro de nuestra red, como norma, hemos establecido lo siguiente:
- Si, tras una monitorización previa, se determina que el paciente es realmente hipertenso se le puede recomendar la medicación por la noche, justo antes de acostarse.
- Unos meses después hay que repetir la monitorización ambulatoria para corroborar si la medicación está siendo efectiva o no.
Las claves de un buen control de la tensión
Para medir la tensión utilizan unos aparatos de monitorización ambulatoria conocidos como MAPA.¿Qué procedimiento se sigue para obtener las cifras?
En nuestro anterior estudio los participantes debían medir su tensión con el aparato que le proporcionábamos durante dos días y cada 20 o 30 minutos. Pero hemos visto que reduciendo las mediciones a intervalos de 1 hora las cifras son igualmente representativas.
La recomendación actual, como estándar, es que la monitorización se haga cada hora durante 48 horas. Reducir las mediciones ayuda a que más pacientes cumplan adecuadamente con el registro y estén conformes a que se les haga esta prueba.
Enseñamos al paciente a colocarse y quitarse el manguito de presión arterial, y eso facilita mucho sus actividades diarias porque puede ducharse, cambiarse de ropa sin problemas o incluso salir a pasear. Por la noche, lógicamente, sí se tiene que dejar puesto.
Los relojes inteligentes, conocidos también como wearables, permiten monitorizar de forma automática ciertos datos mientras dormimos. ¿Son útiles también para medir la presión arterial?
La mayor parte de ellos no están validados, por tanto las medidas de presión arterial son poco fiables.
Además, para medir la presión normalmente se requiere una acción por parte del usuario, como apretar un botón. Al no poder hacerse de forma automatizada, no sirven para medir la presión arterial durante el sueño.
Hay que tener en cuenta también que, desde el punto de vista tecnológico, la medida de la presión arterial en la muñeca conlleva una serie de dificultades adicionales, que requieren posiblemente de mayor investigación. Por ejemplo, la posición de la muñeca puede influir en el valor de la media al no estar, como ocurre con el manguito, en la parte superior del brazo, a la altura del corazón.
Pero todas estas cosas se pueden resolver con mayor o menor dificultad. Es algo a lo que estamos abocados: un dispositivo para el consumidor que sea fiable, de precio reducido, y que pueda ser incorporado en su día a día.
Desde mi punto de vista es un tipo de dispositivo que ayudaría a reducir tanto los eventos como la mortalidad cardiovascular y que, en mi opinión, deberíamos ver en el mercado en no más de un par de años.
Más información
European Heart Journal
Hygia Chronotherapy Trial
www.hygia.es