Valldemossa está en plena Sierra de Tramuntana.
En pleno corazón de la Sierra de Tramuntana y con unas vistas que hay que descubrir en primera persona porque las palabras se quedan cortas, Valldemossa es una joya turística de renombrada y merecida fama internacional. Una visita a la isla de Mallorca no está completa si no se pone un pie en Valldemossa, el pueblo más bonito de España para viajar en junio elegido por la revista National Geographic. Y uno de los pueblos más bonitos del mundo.
Cerca de Palma pero tan distinta
Valldemossa está a tan solo 17 km de Palma de Mallorca pero parece que te adentres en otro mundo. La carretera que te lleva al pueblecito donde llegó el músico Chopin en 1838 para tratar su tuberculosis te sumerge con fuerza en la Sierra de Tramuntana, con toda su imponente y abrupta belleza cien por cien mediterránea.
Tras el sinuoso camino de curvas llegas a tu destino para descubrir un pueblecito con aires medievales, casas color ocre y calles empedradas, que se alza en medio de un precioso valle rodeado de montañas. Valldemossa está, literalmente, colgada de esta cadena montañosa, la Sierra de Tramuntana, que es patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Pero el atractivo de Valldemossa no se limita al enclave natural donde se encuentra o a sus aires medievales que le dan un encanto irresistible. El pueblo tiene un rico pasado histórico y reúne monumentos de primer orden de obligada visita.
Un pueblo con encanto y con historia
Simplemente callejear por Valldemossa es una delicia para los sentidos, pero además tiene mucho y muy importante por visitar. Aquí el rey Jaume II, primer monarca del Reino de Mallorca, edificó un palacio para su hijo Sancho en el siglo XIV. Más tarde el palacio fue cedido a la Orden de los Cartujos y lo transformaron en la Real Cartuja. Aquí fue donde se hospedó el compositor Frédéric Chopin y su amante George Sand en 1838. Se alojaron en una celda de la Real Cartuja y Chopin llegó a afirmar que Valldemossa era el "más hermoso lugar del mundo". Una afirmación que el visitante puede corroborar si visita las dependencias donde se hospedó porque las vistas a la Sierra de Tramuntana con el mar a los lejos son literalmente espectaculares.
Otros muchos visitante ilustres que llegaron a Valldemossa atraídos por su belleza fueron Rubén Darío, Unamuno o Azorín. En la actualidad celebridades como Michael Douglas tienen casa en la Sierra de Tramuntana y la visitan cada año.
Qué ver en Valldemossa
Valldemossa se puede visitar en un día. Estos son los lugares que no debes perderte:
- La Real Cartuja de Valldemossa. Se trata de un gran conjunto monumental con aire de convento medieval donde destaca la iglesia, una antigua farmacia, colecciones de arte y, sobre todo, las celdas donde se alojaron visitantes ilustres como Chopin.
- Museo de Frédéric Chopin y George Sand. En la celda número 4 de la Cartuja, donde se alojó Chopin y su amante, se encuentra el museo de Frédéric Chopin con objetos como el piano que el músico se trajo de París.
- Jardines del Rey Juan Carlos I. Después de visitar la Cartuja y el Museo de Chopin es aconsejable pasear por estos jardines ubicados en el patio del antiguo claustro de la Cartuja. Descansar en alguno de sus bancos es reconfortante y permite observar los bustos de celebridades que han pasado por aquí como el del pintor modernista Santiago Rosiñol.
- Palacio del Rey Sancho. Se sitúa muy cerca de la Real Cartuja y recuerda a una casa señorial con aires palaciegos. Pueden visitarse todas las estancias, que están ambientadas con decoración y mobiliario de la época.
- Otros lugares de interés. La iglesia de San Bartomeu, la casa natal de Santa Catalina Thomas o el mirador de Miranda des Lledoners son otros puntos del municipio que merecen una visita.
- Sus calles. Callejear por Valldemossa ya es de por sí un placer. No hace falta tener un rumbo concreto porque el pueblo es pequeño y sus calles empedradas nos acabarán llevando fácilmente hasta la Real Cartuja u otros monumentos de visita obligada.
Por qué visitar Valldemossa en junio
National Geographic aconseja visitar Valldemossa en junio por varios motivos:
- Para escuchar la música de Chopin en el Festival Pianino.
- Descubrir un San Juan muy especial en el cercano pueblo de Deià.
- Visitar las mejores calas y playas de Mallorca sin las aglomeraciones de agosto.