Sí, 2 o 3 meses después de una situación de fuerte estrés (por ejemplo, la muerte de un familiar) puede desencadenarse una caída importante de cabello llamada efluvio telógeno.
En la mayoría de los casos, pasado un tiempo (entre 6 y 9 meses) la caída de pelo se detiene y habitualmente se recupera el aspecto previo.