En general, los dolores perineales bien diagnosticados tienen solución independientemente de su intensidad y del tiempo que haga que se estén sufriendo.
Pero para eso deben verte un ginecólogo y un fisioterapeuta experto, que te harán una entrevista inicial y una exploración indolora.
Aunque a menudo forma parte de un equipo multidisciplinar, el fisioterapeuta, mediante técnicas de terapia manual, hace que:
- Las cicatrices (si las hay) recuperen elasticidad.
- Relaja las contracturas musculares.
- Devuelve movimiento a las estructuras rígidas.
- Propicia el retorno venoso en caso de hemorroides por congestión.
- Te enseña a realizar ejercicios que equilibren las tensiones musculares.
Además, la fisioterapia también usa tecnología para potenciar y acelerar el efecto de los tratamientos, como la radiofrecuencia. El tratamiento es siempre individualizado e indoloro.