La obstrucción nasal puede deberse a un problema anatómico o a un proceso inflamatorio y el más habitual suele ser la rinitis alérgica.
Sea cual sea tu caso, te recomiendo lavados nasales diarios con preparados de agua de mar, que puedes encontrar en la farmacia.
También es recomendable que te suenes con frecuencia, cada lado por separado, para eliminar mucosidad y evitar que entre en la trompa del oído.