El agua de kéfir es una bebida que contiene nódulos de kéfir, un conjunto de microorganismos, bacterias y levaduras que fermentan un líquido azucarado.
Se considera que esta bebida regenera la flora intestinal, sobre todo en enfermedades que aparecen tras la toma de ciertos medicamentos o cuando hay algún tipo de infección.
Pero eso no es todo, los microorganismos son capaces de producir vitaminas, sobre todo B6, que beneficia la salud cardiovascular y aumenta las defensas.
Se puede elaborar en casa mezclando entre 60 y 80 g de azúcar por litro de agua y los nódulos. El resultado: una bebida con poco azúcar (se ha convertido en gas durante la fermentación) y con muchos probióticos.