Después de realizarse la extracción de una muela del juicio (cordal) es muy recomendable desde el día siguiente y durante al menos una semana, realizar unos enjuagues con un colutorio, después del correcto cepillado, para evitar el depósito de restos de alimentos y una posible infección (alveolitis).
Los colutorios más utilizados llevan clorhexidina en diferentes concentraciones. Existen multitud de colutorios, con diferentes componentes según la indicación (para los problemas de encías, de mal aliento, aftas y heridas, etc.) pero deben de estar siempre indicados por el dentista y no usarse indiscriminadamente.
Es importante que los colutorios no se utilicen durante más de diez o quince días, pues podrían cambiar el pH de la boca e incluso teñir los dientes. Son también muy recomendables los "sprays" de clorhexidina, pues a la función antiséptica de prevención de infección se le une la mecánica de "arrastre" de restos en el lugar de la extracción.
Un consejo "casero" y muy recomendable es realizar los enjuagues bucales con agua con sal y un poco de bicarbonato, funciona de maravilla.