Sí, el estado de la córnea es una de las características del ojo que debemos estudiar para saber si un paciente es candidato a cirugía láser o no.
Revisamos en profundidad su estructura, regularidad y grosor. Y si encontramos alguna anomalía o irregularidad patológica, eso nos puede obligar a descartar la corrección con láser. Aun así, disponemos de perfiles de tratamiento personalizados para determinadas alteraciones corneales.
En cuanto a la edad máxima de un paciente para ser operado, no hay ninguna. Pero es cierto que, a más edad, más nos decantaremos por implantar una lente intraocular (para solucionar de paso las cataratas o la vista cansada o presbicia). Sin embargo, el láser excimer se puede emplear para realizar ajustes, por ejemplo, tras una intervención de cataratas.
Si estás pensando en realizarte una operación de cirugía refractiva, lo más adecuado es que acudas a una consulta preoperatoria para que el oftalmólogo estudie exhaustivamente tu caso.