Luce un escote de vértigo y más firme sin sujetador

La del escote es una de las zonas del cuerpo con la piel más sensible y, con el paso de los años, tiende a perder firmeza. Pero con cremas, buenos hábitos y ejercicio puedes rejuvenecer y mejorar el aspecto de tu escote.

Actualizado a
escote de vértigo
Istock

Con la edad aparecen manchas y arrugas en la zona del escote.

María Teresa Alcalde
María Teresa Alcalde

Licenciada en Farmacia y experta en Dermocosmética

La piel del escote es muy delgada, frágil y no está sujeta por ningún músculo. Por eso, es menos elástica, menos resistente y tiende a relajarse más que la de otras partes del cuerpo, sobre todo cuando se ve afectada por cambios hormonales (durante el embarazo, la menopausia...). Además, es una de las zonas más expuesta a las condiciones ambientales, especialmente a los rayos ultravioleta. 

Todo ello puede provocar que aparezcan manchas, arrugas, rojeces, flacidez, aspecto envejecido... y que tal vez no te sientas segura sin usar un sujetador que sujete bien el pecho. Pero debes saber que, con unos cuidados a medida, puedes lograr unos resultados excelentes. 

qué cosméticos usar cada día para tu escote

Si limpias, aclaras y reafirmas la zona del escote a diario, pronto empezarás a notar los resultados.

1. Limpia la zona dos veces al día con la misma limpiadora que usas en la cara. Considera el escote como una extensión del rostro y dedícale las mismas atenciones para que la calidad de la piel sea igual.

2. Aclara las manchas, si ya han aparecido, con un sérum despigmentante. Si no tienes uno, sustitúyelo por un sérum de efecto tensor, que previene y combate el descolgamiento de la piel tan propenso en el escote.

3. Refuerza la firmeza y la densidad de la piel. Para lograrlo necesitas una crema que combine antioxidantes, porque impiden que las fibras de elastina que sostienen la piel se vuelvan rígidas; y estimulantes de la formación de colágeno como los péptidos.

Extiende bien la crema con la palma de la mano y siempre de abajo arriba: desde el pecho a los hombros y hasta la base del cuello. Si la aplicas a diario, masajeando la zona en círculos, mantendrás la elasticidad y firmeza de la piel y reducirás el riesgo de que se formen arrugas y “líneas de sueño” en el escote.

4. Usa protector solar si lo llevas al descubierto. Ten en cuenta que los rayos penetran perpendicularmente en la piel y, por lo tanto, por la posición del escote pueden llegar a más profundidad, dañando la epidermis (que es su capa más externa). Elige una crema solar con SPF50+ que proteja frente a todo tipo de radiaciones (UVA cortos y largos, luz visible y luz infrarroja). 

Y si no quieres renunciar a tomar el sol, hazlo siempre de forma progresiva: empieza con un par de minutos y aumenta el tiempo poco a poco. 

5. Disimula las manchas con maquillaje. Si tienes rojeces o manchas aisladas, extiende un poco de corrector sobre ellas. Difumínalo bien y después aplica el fotoprotector (ya sea con o sin color).

Si son abundantes y extensas, después de la crema de día debes utilizar un fotoprotector con color o una CC Cream. De esta manera, proteges
y unificas el tono de la piel con un único producto.

Además, puedes aplicar unas gotas de autobronceador líquido, para lucir un bonito tono dorado y potenciar el atractivo del escote. 

Buenos hábitos que reafirman el escote

Aparte de la cosmética, sigue estos consejos en tu día a día.

1. Duerme boca arriba para prevenir las arrugas verticales que se forman al dormir de lado. Ponte un cojín bajo la corva de las rodillas para estar más cómoda y evitar que la columna se arquee.

2. Evita el agua muy caliente porque debilita la piel. Finaliza la ducha con un chorro de agua fría dirigido a esa zona. 

3. No pulverices el perfume directamente sobre el escote. El alcohol deshidrata la epidermis y los componentes del perfume pueden propiciar la aparición de manchas cuando salgas a la calle y la piel se exponga al sol.

4. Evita los sujetadores push up, que levantan y aprietan los pechos y, al impedir que estén en su posición natural, favorecen las arrugas. Y para practicar deporte utiliza uno específico para que la piel no se distienda con los movimientos. Déjate asesorar por una especialista en corsetería para elegir mejor tu tipo de sujetador en caso de que lo uses.

5. Elige deportes que tonifiquen los músculos del pecho, como la natación, el remo y las flexiones de brazos. Los ejercicios de fuerza con pesas también pueden ayudarte.