Las estrías son una afectación estética de la piel que pocas personas se libran de sufrir, tanto hombres como mujeres. Se muestran en nuestro cuerpo como finas franjas irregulares que se producen generalmente por el estiramiento de la piel, como consecuencia de un embarazo, de cambios bruscos de peso, de crecimiento rápido de los niños o a consecuencia de algunas enfermedades.
Como nos explica María Teresa Alcalde, Licenciada en Farmacia y experta en Dermocosmética, las estrías desaparecen en ocasiones, pero no siempre es así, y pueden perdurar en el tiempo si no se toman las debidas precauciones.
Qué son las estrías
Las estrías son marcas visibles en la piel, normalmente largas y finas, que ocurren cuando esta se estira o se contrae rápidamente. Este cambio abrupto provoca que se rompa el colágeno y la elastina que sostienen nuestra piel.
Las estrías se desarrollan en un inicio como líneas paralelas, brillantes y rojizas, que tras un tiempo adquieren la apariencia de una cicatriz blanquecina.
Dónde aparecen y cómo evolucionan
En la juventud son comunes en los muslos, los glúteos, las caderas, los senos (las mujeres) y la espalda (los hombres).
Durante el embarazo se suelen formar en el abdomen, los senos, los costados y los muslos.
Desde su aparición, las estrías van evolucionando cambiando de textura y color:
- En los inicios (su primera fase), las estrías son de color rojo-violeta y pueden causar picor.
- Después se convierten en cicatrices de color blanco nacarado y pueden presentar una formación de surcos en la piel con la parte central un tanto hundida.
las causas de la aparición de estrías
Nuestra piel, por lo normal tan flexible, se acaba rompiendo en sus capas más profundas, sobre todo en épocas en las que nuestro cuerpo cambia más o hay desequilibrios hormonales importantes, por rupturas en el tejido conectivo o falta de colágeno.
Hay una mayor predisposición a la aparición de estrías durante:
- La adolescencia, debido a los cambios hormonales o cuando hay un crecimiento acelerado (afecta al 27 % de jóvenes).
- La gestación (las sufren entre un 75 % y un 95 % de embarazadas, sobre todo las más jóvenes y si es el primer embarazo).
- También en la etapa menopáusica.
Factores de riesgo
- Un aumento o una pérdida de peso acelerados contribuye a su aparición.
- Son más frecuentes si hay familiares cercanos que las tienen.
- Tienen más riesgo los fumadores y quienes realizan ejercicio físico intenso, sobre todo musculación.
- El nivel de la hormona cortisol (producida por las glándulas suprarrenales) también podría influir ya que debilita las fibras elásticas de la piel.
- Quienes siguen tratamientos con corticoides durante mucho tiempo tienen más riesgo de sufrirlas, porque pueden acabar alterando la piel.
Cómo eliminar las estrías
De momento, no existe un tratamiento para eliminar completamente las estrías que se encuentran ya en la fase cicatricial.
En cambio, si están recién formadas, los cosméticos y los tratamientos estéticos sí mejoran significativamente su apariencia y evolución.
- Las cremas más eficaces contienen activos que estimulan la formación del colágeno de la piel como el retinol, la centella asiática (o su componente principal, llamado asiaticósido), el silicio, los hidrolizados de colágeno y elastina, y el aceite de rosa mosqueta.
Es importante destacar que el retinol no debe emplearse durante el embarazo. Y contrariamente a lo que muchas personas creen, el aceite de almendras no tiene acción antiestrías porque no activa la formación de colágeno, aunque sí nutre y da más elasticidad a la piel.
La frecuencia de uso recomendada de la crema antiestrías es de una a dos veces al día, acompañada de un masaje de unos 15 minutos de duración. Según los estudios científicos, el masaje estan importante como el producto para prevenir y mejorar las lesiones.
Por ello, para prevenir su aparición es importante nutrir e hidratar la piel con la cosmética y adecuada. También hidratarse correctamente y cuidar la alimentación.
Tratamientos de choque
En casos severos, se pueden aplicar distintas terapias con luz y láser para estimular la producción de colágeno o promover la elasticidad.
- Por ejemplo, el láser de colorante pulsado reduce las estrías rojas y el láser no ablativo mejora las blancas.
- Por su parte, la radiofrecuencia fraccionada da excelentes resultados en ambos tipos y reafirma la piel.
Dependiendo del período de tiempo desde la aparición de las estrías y del tipo de piel, el especialista recomendará el tratamiento más adecuado.