Qué hacer (y lo que debes evitar a toda costa) si te has quemado con el sol

Después de un día de playa, la piel necesita unos cuidados especiales para compensar los daños provocados por el sol, sobre todo si está enrojecida o te has quemado. Te explicamos qué hacer y qué no si te has quemado por el sol en la playa.

Actualizado a
piel quemada sol
Istock

El daño del sol sobre la piel se va acumulando y empeorando con el paso de los años.

cosmeticos no usar verano
Carmen Bauzá

Farmacéutica especializada en dermocosmética

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

Cuando nos exponemos al sol la piel sufre importantes pérdidas, especialmente en lípidos. De hecho, cuando tomamos el sol nuestra piel se seca porque pierde la película grasa que la recubre, no porque pierda agua.

Estos efectos pueden agravarse si no aplicas la protección solar de manera adecuada o si te expones de manera excesiva. La piel puede mostrarse enrojecida e, incluso, puedes quemarte. El estado de las arrugas y los capilares de la piel empeoran.

Además, no olvidemos que la piel tiene memoria. El daño se va acumulando y empeorando con el paso de los años dando lugar a lo que se conoce como fotoenvejecimiento: arrugas, piel áspera, flacidez, manchas…

Por ello, la primera recomendación es exponernos al sol con moderación y aplicar protección solar alta y en cantidad adecuada. Según una encuesta del Consejo de Farmacéuticos, la mayoría no sabemos la protección que nos conviene y un 82% nos hemos quemado alguna vez.

Carmen Bauzá, farmacéutica especializada en dermocosmética, nos explica cómo reconfortar la piel tras la exposición al sol.

Cómo reparar la piel quemada por el sol

Después de una jornada al aire libre, cuídala como se merece:

  • Ducha corta y con agua fresca. Utiliza geles de baño que contengan aceites y que respeten el pH natural de tu piel para no alterar su equilibrio natural. Evita geles de ducha muy espumosos, alcalinos o las sales de baño ya que propician la sequedad de la piel pudiendo empeorar el picor, la irritación e, incluso, la tendencia a infecciones.
  • Aplica crema emoliente en gran cantidad. Puedes aplicar tu crema habitual o un aftersun. Los aftersun están especialmente formulados para proporcionar alivio a la piel tras la exposición solar. Además, aportan activos que combaten los daños causados por el sol.
  • Si tienes tendencia a las rozaduras de la piel, por ejemplo, entre los muslos, utiliza productos antifricción para evitar la aparición de irritaciones. La piel está más frágil y las rozaduras podrían agravarse.

Cómo tratar la piel si está enrojecida

Cuando la exposición al sol ha sido muy prolongada y la piel se muestra enrojecida e irritada, reparar y calmar es el objetivo clave.

  • Evita los baños largos y el agua caliente en la medida de lo posible.
  • Deja a un lado los remedios caseros como el viagre o el pepino y en su lugar, escoge productos con indicación específica para acelerar la reparación de la piel. Los acemananos del aloe vera o el pantenol son activos indicados para ello.
  • Tu rutina facial habitual debe esperar. Si tienes la piel del rostro alterada o enrojecida por el sol, evita activos cosméticos que pudieran resultar irritantes como los retinoides (antiedad) o el ácido kójico (despigmentante). Este consejo también se aplica a la mañana y la noche previa a la exposición solar.
  • Evita exfoliar la piel hasta su completa recuperación. Para ello, evita los exfoliantes mecánicos - tipo scrub - o los químicos, como los alfahidroxiácidos.
  • Aplicación suave. Tanto en el cuerpo como en el rostro, aplica los productos con un masaje suave, sin frotar. Evita también la fricción al secarte con la toalla.

Fortalece tu piel con...

  • Activos reparadores: ácidos grasos, ceramidas, niacinamida, escualeno, centella asiática…
  • Activos calmantes: bisabolol, caléndula, hamammelis…
  • Antioxidantes: vitamina E, vitamina C, extracto de regaliz…

Cómo conseguir un bronceado más sano

El bronceado es una defensa de nuestra piel para protegerse del sol. La exposición al sol debe durar solo unos minutos y siempre con protección solar alta.

Para conseguir un mayor tono bronceado, puedes tomar betacarotenos –antioxidantes – de junio a septiembre o utilizar autobronceadores.

errores en la playa

  • Los primeros días, es normal que aparezcan granitos y picor en el escote. Normal no es. Puede deberse a un brote de acné debido al exceso de sudoración y a la producción de melanina o a un cuadro más grave, como la alergia o erupción solar. En este caso, utiliza un limpiador suave y protección solar alta durante el día (aunque no tomes el sol). Si tienes dudas, consulta a tu dermatólogo.
  • Si está nublado, no hace falta el fotoprotector. Las nubes solo detienen los rayos infrarrojos que dan sensación de calor, pero dejan pasar el 80% de los UV. Por tanto, el peligro de quemadura solar es mayor, ya que no se percibe el aviso del calor.
  • El maquillaje con SPF 15 o 30 puede sustituir al fotoprotector.Es insuficiente, ya que no se aplica en ciertas zonas (párpados, orejas...). Además, al llevar color, podría hacer que lo apliques en cantidad insuficiente para evitar el efecto máscara.