El suelo pélvico suele ser una gran olvidado para muchas mujeres. Generalmente, no se ejercita hasta que llega el primer embarazo o las pérdidas de orina después del parto o la menopausia. Pero si se ejercita desde jóven y se corrigen algunos malos hábitos es posible evitar trastornos muy comunes como la incontinencia.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico es un conjunto de músculos y ligamentos que rodean la cavidad abdominal en su parte inferior. Su función es sostener todos los órganos pélvicos (vejiga, uretra, útero y vagina; y recto) para su correcto funcionamiento.
Con la edad y los embarazos es normal que esta musculatura se debilite y aparezcan pérdidas de orina no deseadas al toser, estornudar o hacer ejercicio. También se pueden notar molestias en la zona pélvica o dolor al tener relaciones sexuales.
Con esta sencilla rutina podrás trabajar todos los días este importante grupo de músculos. Puedes utilizar una fitball o una toalla enrollada para ayudarte a realizar mejor el ejercicio.
Al realizar esta serie es importante que con el tiempo vayas ganando conciencia y seas capaz de hacer los ejercicios sin contraer otros músculos más allá de los deseados.