Cómo calmar a tu perro si tiene miedo a los petardos

A partir de la noche de San Juan se abre una temporada estival de fiestas populares donde no faltan los petardos y los fuegos artificiales. Diversión para todo el mundo salvo para tu mascota. Los perros son los que más sufren estos ruidos. ¿Sabes qué puedes hacer para calmarlo?

Actualizado a
perro miedo petardos
Istock

Los perros tienen un oído mucho más sensible que los humanos y los petardos les activan las alarmas de peligro.

Pablo Cubí
Pablo Cubí del Amo

Periodista

Hay dos días que suponen un auténtico tormento para nuestro perro estas son la Nochevieja y la noche de San Juan. Son las noches más ruidosas. Es el momento en que más sitios de España tiran petardos y fuegos artificiales.

Y no son las únicas. El verano se suceden las celebraciones populares en las que no falta la pirotecnia, mayoritariamente ruidosa. Unas fechas en las que nuestras mascotas sufren especialmente, como bien saben sus propietarios.

Qué efectos tienen los petardos en los perros

El motivo es que los perros tienen un oído mucho más sensibles al ruido que el nuestro y no pueden comprender como nosotros qué está pasando. Su instinto les indica que están en peligro.

Por eso los petardos tienen unos efectos muy negativos en los perros, tanto a nivel físico como psicológico.”, explica el veterinario José Luis Villaluenga, expresidente de la Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia y del Maltrato Animal. “Cuando hay explosiones de pirotecnia, se asustan mucho, se ponen nerviosos y se estresan.”

Antiguamente, sobre todo en zonas rurales, los perros vivían en la casa sin estar tan encerrados y podía huir fácilmente de los petardos. Salían corriendo al campo o en casas grandes se escondían bajo la cama. Hoy en día los petardos se han popularizado más y los perros se sienten más acorralados.

  • Pueden sufrir una serie de alteraciones que van desde la taquicardia, los temblores, la salivación, los vómitos, las diarreas e incluso los ataques epilépticos”, enumera el veterinario Villaluenga.
  • También pueden sufrir daños auditivos irreversibles, como la sordera o el tinnitus.
  • A nivel psicológico, pueden desarrollar fobias, ansiedad, depresión o conductas agresivas”, añade el experto.

Qué podemos hacer para calmar al perro

Para frenar en los posible estos riesgos y ayudar a que mantenga la calma lo fundamental es crear un ambiente tranquilo y seguro para ellos en casa.

  • Preparar su cama o su caseta lo más aislada posible. Cerrar ventajas y bajar persianas.
  • Hay que evitar dejarlos solos o atarlos, porque pueden intentar escapar o hacerse daño.
  • Dejar puertas abiertas incluso en los armarios para que puedan buscar rincones donde esconderse.
  • Poner música relajante, la radio o la televisión para disimular el ruido exterior.
  • Ignorar sus sustos para no crear mayor sensación de pánico.

Si en los momentos en que mantiene la calma le mostramos atención de alguna manera le estaremos diciendo que es lo que hay que hacer.

Qué le podemos dar para que no sufra

Hay que tratarlos con cariño y paciencia, sin regañarlos ni castigarlos si se comportan de forma extraña -insiste el veterinario Villaluenga-. En algunos casos, se puede recurrir a la medicación o a productos naturales que les ayuden a calmarse, pero siempre bajo prescripción veterinaria.

Los medicamentos calmantes para perros son muy fuertes y con posibles efectos secundarios. Consulta primero al veterinario

En este sentido el Colegio de Veterinarios de Cataluña ha dado también una serie de recomendaciones:

  • Utilizar feromonas. Se trata de una sustancia química que calma los ánimos del animal mediante el olfato. Se pueden comprar en forma de difusor o en collar. Se han de aplicar días antes de la fecha festiva.
  • Suplementos nutracéuticos. Son complementos nutricionales que les calman. Incluyen melatonina (la hormona que induce al sueño) o triptófano (otra sustancia que ayuda a disminuir el estrés).
  • Medicamentos. Son fármacos muy potentes que dejarán a nuestra mascota “fuera de juego”. Por tanto solo para casos excepcionales y bajo receta del veterinario. Y se han de probar antes, puesto que existe el riesgo de la “reacción paradójica, un efecto secundario que lo pone aún más nervioso.

Consulta con el veterinario cuál es la mejor opción para tu perro.

Lo que NO hay que hacer con nuestra mascota

A veces por desconocimiento o negligencia cometemos errores que pueden llevar a nuestra mascota a una situación aún más estresante de la que supone el ruido de los petardos y los fuegos artificiales.

  • Forzarle a salir. El perro ha de salir a dar sus paseos diarios. Por tanto programa el día para que sea cuando aún no ha empezado la fiesta o hay menos jaleo. Pero si siguen los petardos y tiene miedo, no fuerces la salida.
  • Dejarlo suelto. Llévalo siempre atado y no hagas salidas largas. Debes poder regresar rápido a casa si fuera necesario. Procura no tirar de la cuerda. Si se pone a correr, lo acompañaremos.
  • Abrazarlo si se asusta. No empieces a acariciarlo cuando se asusta. Entenderá que su reacción es correcta.
  • Ponerle petardos cerca para acostumbrarlo. “Puede llegar a desesperarse, quedarse paralizado y arrastrar los efectos toda la vida”, advierten los veterinarios catalanes.

¿Se puede acostumbrar un perro a los petardos?

Este año ya es demasiado tarde para seguir una técnica a largo plazo. De cara al año que viene te puedes plantear acostumbrar tu perro a los ruidos de la pirotecnia.

Es la solución más útil. Se trata de una terapia denominada desensibilización de las mascotas. El objetivo no es que los perros disfruten del ruido. No va a pasar. Pero al menos podemos conseguir que no lo perciban como una amenaza.

Son técnicas que llevan a cabo veterinarios etólogos. Consulta en una tienda de mascotas o en el colegio de veterinarios de tu localidad.