Acropaquia: las enfermedades que oculta la forma de tus dedos

Los dedos en forma de palillo de tambor o acropaquia puede ser una pista de enfermedades pulmonares, cardíacas o cáncer, aunque también puede estar causado por el mal de altura.

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La acropaquia se caracteriza porque se hincha la punta de los dedos incluida la uña.

Dr. Francisco Marin
Dr. Francisco Marín

Médico de Atención Primaria

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

La forma de los dedos puede dar pistas sobre tu salud y ser un indicador de alguna enfermedad, por lo que conviene fijarse en ellos y si notamos alguna señal extraña acudir al médico. Una de las enfermedades más curiosas que afectan a esta parte del cuerpo es la acropaquia, conocida también como dedos en palillo de tambor.

Qué es la acropaquia

Las acropaquia se caracteriza por un agrandamiento de la punta de los dedos, las uñas adquieren la forma del vidrio de un reloj de pulsera, desaparece el ángulo que forma la raíz de la uña con el dedo y al presionar la uña se produce una sensación esponjosa. Estas señales son suficientes para diagnosticar dedos en palillo de tambor.

Cómo sospechar de acropaquia

Al principio la acropaquia puede ser difícil de identificar porque no duele y no solemos prestar atención a la apariencia de los dedos a no ser que la deformidad sea muy alarmante. En un artículo publicado en Elsevier, el doctor M. C. Toribio, médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, apunta una forma sencilla y útil de sospechar que sufres dedos en palillo de tambor: "si la altura o grosor del dedo en la base de la uña es mayor que en la articulación de los dedos, puede asegurarse, casi con certeza, la existencia de acropaquia".

Antes de diagnosticar acropaquia hay que descartar que no se trate de artritis, celulitis, quistes óseos o nódulos de Heberden (son frecuentes en casos de artrosis).

Qué causa los dedos en palillo de tambor

Esta forma curiosa que adquieren los dedos puede deberse a varias causas. En un 75-80% de los casos se debe a una enfermedad pulmonar que puede ser cáncer de pulmón, infecciones como tuberculosis o EPOC entre otras; mientras que en un 10-15% de los casos la causa es una enfermedad cardíaca, desde cardiopatías congénitas hasta endocarditis (inflamación inflamación del revestimiento interno de las cavidades y las válvulas del corazón). La enfermedad inflamatoria intestinal, los tumores digestivos, la cirrosis o el hipertiroidismo también pueden causar la afección aunque es más extraño.

Por eso es muy importante realizar un estudio completo del caso que incluya exploración física y pruebas de laboratorio para detectar la causa. La acropaquia no es grave, pero la enfermedad que la provoca sí puede serlo. Tratarla cuanto antes mejorará el pronóstico.

En gente joven una posible causa es la exposición a grandes alturas que provoca la enfermedad de Monge o el mal crónico de montaña. Se produce en personas que viven a unos 3.000 metros de altura y el cuerpo pierde la capacidad de adaptarse a las bajas presiones, lo que provoca niveles bajos de oxígeno (hipoxia). En estas personas, la inflamación de la punta de los dedos va acompañada de cansancio, cefalea, baja tolerancia al ejercicio, sensación de mareo y somnolencia. Los síntomas desaparecen cuando la persona se muda a lugares que están más cerca del nivel del mar.