Los calambres musculares pueden ser muy molestos y dolorosos, pero puedes evitarlos o aliviarlos con soluciones naturales.
Seguro que alguna vez has notado un fuerte espasmo y una sensación de tirantez en la pierna. Se trata de un calambre muscular y lo primero que conviene hacer es estirar suavemente el músculo para ayudar a relajar el músculo y aliviar el calambre . Puedes hacerlo estirando la pierna y flexionando suavemente el pie hacia arriba (hacia tu cuerpo). También puede ayudar masajear ligeramente el músculo acalambrado, aplicando una presión suave y haciendo movimientos circulares con las manos para ayudar a aumentar el flujo de sangre al área y promover la relajación muscular.
Los calambres musculares (o rampas) son contracciones o espasmos repentinos, intensos e involuntarios que pueden ocurrir en uno o más músculos de cualquier parte del cuerpo, aunque son más habituales en las piernas, en especial en los músculos de la pantorrilla y las mujeres tienen más tendencia a padecerlos.
Pueden ser muy incómodos y dolorosos, y a menudo van acompañados de una sensación breve y acusada de tirantez en la zona afectada. Su intensidad y duración varían (desde unos segundos hasta varios minutos) y, una vez han desaparecido, es posible que quede algo de dolor o sensibilidad muscular residual.
Las causas más habituales de los calambres musculares son la falta de hidratación, el déficit de algunos minerales como calcio, magnesio o potasio, o bien problemas circulatorios. También pueden aparecer si estamos mucho rato en la misma posición, si hacemos ejercicio sin calentar o si llevamos un calzado con mucho tacón o muy plano.
Los siguientes remedios naturales actúan sobre las causas que provocan los calambres musculares y te ayudarán a evitarlos o a que no aparezcan tan a menudo.