Un fuerte dolor en el pecho, a la altura del corazón. Ante este síntoma lo primero que, seguramente, te preguntas es: "¿y si es un infarto?"
Por fortuna, no todos los dolores que se notan en el pecho se deben a un infarto de miocardio.
- Precisamente para proteger este órgano tan vital (y también los pulmones) contamos con la caja torácica. Y el origen del dolor a veces está en ella. En concreto, puede deberse a un trastorno bastante común, la costocondritis (conocida también como osteocondritis).
Qué es la costocondritis
"La costocondritis es una inflamación de la parte del cartílago, donde acaban las costillas y se unen al esternón", nos cuenta el doctor Enrique Ornilla, responsable del Servicio de Reumatología de la Clínica Universidad de Navarra (CUN).
- Estos cartílagos proporcionan movilidad a la caja torácica, que debe expandirse cuando cogemos aire. Pero, si están inflamados, provocan dolor precisamente cuando los movemos. Por ejemplo cuando giramos el tronco, cuando nos inclinamos o al toser.
Es más común en mujeres y en personas de más de 40 años
- El dolor es agudo, punzante y se nota en el pecho, "normalmente entre la segunda y la quinta costilla", aclara el especialista. Y no siempre es unilateral: a veces duelen las dos partes, tanto la izquierda como la derecha.
Por qué aparece
La costocondritis puede aparecer, por ejemplo, después de un periodo de tos intensa, o tras realizar un esfuerzo físico importante como levantar un objeto muy pesado.
¿Pero por qué unas personas notan este dolor y otras no?
- "Realmente no se sabe muy bien el motivo –nos responde el experto–. Aunque, probablemente, esté asociado a problemas en la columna dorsal". O, lo que es lo mismo, la zona de las vértebras que está justo a la altura de la caja torácica.
- Cuando no hay un movimiento correcto en las vértebras dorsales, la parte de delante del torso también puede verse afectada. "Es posible que, en muchos casos, haya una relación entre ese dolor de la zona anterior con un problema en la zona posterior", aclara el doctor Ornilla.
Cómo diferenciarlo del dolor de un infarto
El dolor de la costocondritis es un poco diferente al que provoca un ataque al corazón.
- "En el dolor originado en el corazón también se da una sensación de opresión, y suele irradiarse hacia el brazo izquierdo o hacia el cuello", expone el especialista.
- El de la costocondritis, en cambio, no se irradia. Se nota con el movimiento y, muchas veces, también con la presión. "Si uno presiona el tórax y le duele, eso no es un infarto", afirma.
Tratamiento
"Lo normal es que el dolor de la costocondritis se pase en una semana o dos", sostiene el doctor.
- Lo habitual es tratarlo con analgésicos o antiinflamatorios, y suelen ser bastante efectivos en estos casos.
"Los estiramientos del pilates, el yoga o el taichí ayudan a liberar la zona dolorida"
- Si la persona no responde bien al tratamiento (algo que, según el experto, no suele pasar a menudo) se puede valorar hacer una infiltración, que permite inyectar directamente el anfiinflamatorio en la zona afectada.
"Es muy raro que no se resuelva con una infiltración", aclara el experto. Eso sí, "se suele hacer una prueba de imagen antes, una ecografía o una resonancia magnética, para confirmar que hay un proceso de inflamación", prosigue.
Si, pese a ello, el dolor se prolonga en el tiempo, hay que buscar otros posibles motivos.
Cuando el dolor esconde algo más serio
A veces este dolor se debe a otra alteración, conocida como síndrome de Tietze que, aunque no es tan frecuente como la costocondritis, puede confundirse con ella.
- "En el síndrome de Tietze el dolor se debe a la inflamación de la articulación del esternón, no el cartílago –aclara el experto–. Suele provocar más inflamación que la costocondritis y suele estar ligado a procesos inflamatorios generales, como por ejemplo el que se da en la artritis".
Pero, además de su origen, también hay otras diferencias:
- "Una de las características más claras es que el síndrome de Tietze se nota solo a un lado del tórax (suele afectar a una o dos articulaciones), mientras que la costocondritis puede ser bilateral", sostiene el reumatólogo.
- Como la inflamación es más importante, la zona puede ponerse roja y notarse caliente o, incluso, entumecida.
- La edad de aparición también puede dar pistas: el síndrome de Tietze es más común en gente joven, de menos de 40 años.
Por ello, cuando aparece un dolor en el pecho, además de realizar una ecografía y un electrocardiograma para descartar que el origen sea el corazón o el pulmón, se puede solicitar un análisis de sangre para comprobar si hay o no parámetros inflamatorios en ella (que pueden deberse a un trastorno reumático, un proceso infeccioso o incluso un cáncer).
Puede ser por una artritis si además...
La psoriasis, la aparición de pústulas en las palmas de las manos o en las plantas de lo pies y un acné importante se asocia, también, a enfermedades reumáticas con inflamación.
- Por eso, "cuando hay una inflamación en la parte del tórax y, además, se acompaña de alguna de estas lesiones en la piel hay que ir al médico porque probablemente sea un trastorno más global", advierte el especialista.