Las migraña es un trastorno sumamente incapacitante que puede provocar dolores de cabeza severos varias veces al mes.
Es más habitual en mujeres que en hombres pero, por suerte, después de la menopausia la prevalencia de la migraña en la mujeres disminuye. Sin embargo, aumenta el número de mujeres con hipertensión.
¿Puede haber un vínculo entre ambas cosas? ¿El hecho de sufrir migrañas puede estar relacionado con un mayor riesgo de hipertensión arterial tras la menopausia?
El Dr. Gianluca Severi, del Instituto Nacional de Investigaciones Médicas y Sanitarias de Francia en París, decidió estudiar si existe tal vínculo. Y parece ser que sí. Los resultados de la investigación se han publicado en Neurology, la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología.
veinte años de estudio
Para llegar a la conclusión de que las mujeres migrañosas tienen más riesgo de ser hipertensas pasada la menopausia, el equipo del Dr. Severi estudió los casos de 56.202 mujeres que no tenían hipertensión o enfermedad cardiovascular al llegar a la menopausia.
- De este grupo, 46.659 mujeres nunca habían tenido migraña y 9.543 mujeres sí la habían sufrido. Los casos fueron seguidos durante 20 años completando encuestas de salud cada dos o tres años.
- Durante esos 20 años, un total de 12.501 mujeres desarrollaron presión arterial alta y el porcentaje fue mayor entre las que reportaron migraña.
- Además, las mujeres con migraña también desarrollaron presión arterial alta a una edad más temprana que las mujeres sin migraña. La edad promedio de diagnóstico de la hipertensión para las mujeres sin migraña fue de 65 años y para las mujeres con migraña fue de 63.
Según los resultados del estudio que se ha publicado en Neurology:
- La tasa de hipertensión para las mujeres sin migraña fue de 14 casos por cada 1000 mujeres al año, en comparación con los 19 casos por cada 1000 mujeres al año en el caso de las migrañosas.
La migraña, un trastorno muy incapacitante
Los investigadores también comprobaron que el riesgo de desarrollar hipertensión era igual para mujeres con migrañas con aura que sin aura.
- La migraña es por definición una enfermedad que cursa con ataques episódicos (empiezan y acaban), recurrentes e impredecibles.
- Se considera que es migraña episódica cuando las crisis ocurren hasta 14 días al mes, mientras que en la migraña crónica los ataques aparecen 15 o más días al mes.
- Los ataques de migraña duran entre 4 y 72 horas, un margen de tiempo que puede variar de una persona a otra, pero en todo caso no es un dolor de 15 minutos.
- Dichos ataques provocan un dolor de cabeza intenso y pulsátil, que empeora con el movimiento, la luz o el ruido.
- La persona puede sufrir auras sensitivas (por ejemplo ver destellos de luz) que pueden aparecer antes de las crisis o durante ellas.
Por qué la migraña aumenta el riesgo de hipertensión
Son varias las razones que explican por qué la migraña puede estar relacionada con la hipertensión. Así lo explica el Dr. Severi:
- "Se ha demostrado que las personas con migraña tienen signos tempranos de rigidez arterial. Los vasos más pequeños se tornan rígidos y no son tan capaces de acomodar el flujo sanguíneo, lo que provoca aumentos de presión".
- "Otra explicación posible es el vínculo que pueda haber con la genética". La misma predisposición genética vinculada a la migraña podría estar también asociada a la hipertensión.
Sea como sea, el estudio supone un paso importante en la prevención de problemas cardiovasculares en las mujeres.
Por un lado ya se sabía que la migraña era un factor de riesgo de eventos cardiovasculares en general. Y ahora se sabe que también aumenta el riesgo de hipertensión.
Razón de más para que las mujeres migrañosas cuiden todavía más su salud cardiovascular al llegar a la menopausia.