Vómitos, diarrea, dolor abdominal, retortijones, malestar general, fiebre... Son las señales típicas de una gastroenteritis.
La mayoría de las veces se debe a un virus, aunque también puede darse por una infección bacteriana, comer en exceso, tomar algún alimento en mal estado (intoxicación alimentaria) o, simplemente, porque sienta mal uno concreto (intolerancia).
Para aliviar la gastroenteritis y evitar que se complique te sugerimos un plan en 4 fases que no falla.
Las primeras horas de la gastroenteritis
Durante las primeras 12-24 horas conviene ayunar y, sobre todo, rehidratarse para reponer los líquidos y electrolitos perdidos con los vómitos y la diarrea.
Lo ideal para la rehidratación es tomar sueros orales (puedes comprarlos en la farmacia), aunque también sirve beber líquidos con sales minerales (limonada alcalina, que viene a ser un suero oral casero), infusiones sin edulcorar (la manzanilla con anís verde va bien para reducir las náuseas) o agua con unas gotas de limón. Deben ingerirse unos dos litros. Para ello, una pauta a seguir es tomar unas dos cucharadas cada 5 minutos.
En el vídeo el Dr. Pere Beato, Presidente de SEMERGEN Cataluña, detalla qué podemos hacer para encontrarse mejor.
24 horas después puedes comer un poco
Después de 12-24 horas se puede empezar a comer poco a poco. Pero tras haber estado un día sin tomar nada sólido, lo mejor es empezar comiendo un yogur desnatado rico en bífidobacterias (ayuda a restablecer la flora intestinal deteriorada por la diarrea y es de fácil digestión).
Si se tolera bien, la siguiente comida podría ser arroz blanco con pollo hervidos.
introduce la dieta blanda para la gastroenteritis
Transcurrido el periodo de reposo digestivo, posiblemente haya menos molestias, pero sí falta de apetito. Conviene no forzar la máquina porque se puede volver a empeorar.
Es el momento de introducir una dieta blanda repartida en varias comidas frecuentes y raciones pequeñas, con alimentos fáciles de digerir y astringentes (arroz blanco, patata y zanahoria cocidas, biscotes, jamón cocido, tortilla bien cuajada, pechuga de pollo y pescado blanco hervido o a la plancha).
En cuanto a las frutas, quédate con el plátano y el membrillo. La manzana y la pera ralladas, en compota o asadas, también calman el estómago.
cuándo el estómago vuelve a la normalidad
Ya puedes volver a la normalidad. Cuando la evolución de la gastroenteritis es favorable (suelen bastar 3 o 4 días), hay que empezar a "comer normal", pero con sentido común, es decir, de forma suave.
Recupera las verduras evitando las más flatulentas (coles, cebolla cruda) y ve introduciendo los frutos secos, los cereales integrales y las legumbres.
La receta del suero oral
El suero oral casero se prepara con:
- 1 litro de agua.
- 2 cdas. de azúcar.
- 1 cucharadita de sal.
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- El zumo de 2 limones.
Errores frecuentes AL RECUPERARTE DE UNA GASTROENTERITIS
En ocasiones suelen cometerse pensando que pueden aliviar los síntomas, pero no es así.
- Bebidas isotónicas comerciales. Se recurre a ellas como alternativa a los sueros, pero no son aconsejables, sobre todo en niños y personas mayores.
- Automedicarse. Excepto cuando el médico lo indique, es una equivocación recurrir a tomar antibióticos o antidiarreicos. Las medidas dietéticas bastan.
- Comer de todo antes de hora. Pasadas 24 horas puede que no haya malestar, pero hay que comer suave los días siguientes para no irritar el estómago.
Cuidado con el exceso de fibra
No te conviene. Aunque notes que ya te encuentras del todo bien, durante los primeros 5 días evita frutas con mucha fibra como los kiwis o las ciruelas para no activar mucho el tránsito intestinal. Tampoco tomes café.
Ideas para comer cuando tienes gastroenteritis
Día 1.
- 2 litros de suero oral o limonada alcalina.
Día 2.
- Desayuno: Manzanilla sin edulcorar. Yogur.
- Media mañana: Infusión de manzanilla.
- Comida: Arroz blanco cocido con limón. Pollo a la plancha. Manzana asada.
- Merienda: Manzanilla. Yogur.
- Cena: Sopa de arroz blanco y zanahoria. Merluza al vapor con limón. Manzanilla.
Día 3.
- Desayuno: Infusión de melisa. Yogur.
- Mediamañana: Tostada de pan blanco con membrillo.
- Comida: Puré de patata y zanahoria. Pescadilla al vapor. Plátano.
- Merienda: Manzanilla. Pan blanco con jamón york.
- Cena: Sopa de puerro y zanahoria. Tortilla. Yogur.
Día 4.
- Desayuno: Infusión. Tostada integral con compota de manzana.
- Media mañana: Yogur.
- Comida: Verduras con arroz. Pollo con calabacín. Melocotón.
- Merienda: Infusión. Pan con queso fresco.
- Cena: Wok de verduras. Sardinas con patata. Plátano.