La meningitis es una infección cerebral que en ocasiones puede tener consecuencias fatales si no se trata dentro de las 24 horas posteriores al contagio de la enfermedad.
Se producen tres millones de casos cada año y entre las cuatro causas principales de meningitis, la Organización Mundial de la Salud está especialmente preocupada por la meningitis bacteriana.
Y es que, aunque la vacunación está muy extendida, este tipo de meningitis todavía se asocia a una alta mortalidad y a consecuencias neurológicas que incluyen desde pérdida de audición hasta deterioro cognitivo que pueden afectar a casi la mitad de los pacientes que sobreviven.
Existen antibióticos para tratarla pero no siempre funcionan, en gran parte por la resistencia a los antibióticos que se ha generado por el mal uso de estos fármacos. Por eso se investiga en tratamientos alternativos a estos fármacos.
Investigadores de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Lund han descubierto un tratamiento alternativo basado en células inmunes que ayuda a eliminar las toxinas que se acumulan en el cerebro por la infección.
Meningitis bacteriana, la más peligrosa
La meningitis es la inflamación del líquido y las membranas (meninges) que rodean el cerebro y la médula espinal. Provoca síntomas como dolor de cabeza, fiebre, rigidez en el cuello o convulsiones.
La mayoría de meningitis están provocadas por una infección viral, pero las infecciones bacterianas, parasitarias y micóticas son otras posibles causas.
La más peligrosa de todas ellas es la meningitis bacteriana causada por la bacteria Streptococcus pneumoniae (meningitis neumocócica), y puede llegar a provocar la muerte. Requiere tratamiento antibiótico, aunque no no es garantía de curación.
En busca de nuevas estrategias para tratarla, los investigadores demostraron en un estudio realizado en ratas que las propias células inmunitarias del cuerpo pueden eliminar esta infección bacteriana. Así lo resume Chiara Pavan, autora del estudio:
- "Observamos que los neutrófilos, un tipo de células inmunes, forman una especie de red en la membrana del cerebro (las meninges), pero esta misma estructura de red también causa inflamación en el cerebro y evita que se eliminen bien los productos de desecho".
- "Descubrimos que si disolvíamos esa estructura de red pero no las células inmunes, estas podrían acabar matando la bacteria de la meningitis pero sin causar inflamación cerebral".
Qué ocurre si el cerebro se inflama
Los investigadores observaron que, cuando la bacteria infecta las meninges, ocurre lo siguiente:
- Los neutrófilos entran en la membrana del cerebro y crean una red que atrapa las bacterias, pero esta especie de red también bloquea el movimiento del líquido cefalorraquídeo.
No olvidemos que el cerebro se limpia constantemente con el líquido cefalorraquídeo que le entra a través de los vasos sanguíneos. De hecho es el responsable de eliminar los productos de desecho producidos por las células cerebrales.
Este sistema de transporte de fluidos se llama sistema glifático y se ha demostrado que su función es fundamental para evitar la acumulación de placas de proteína beta amiloide en el cerebro en pacientes con enfermedad de Alzheimer.
El transporte glifático de líquido cefalorraquídeo también es importante para evitar la inflamación del cerebro en enfermedades como el ictus.
La inflamación del cerebro, también llamada edema, es potencialmente mortal porque el cerebro está contenido dentro del cráneo.
- La hinchazón comprime los vasos sanguíneos, lo que provoca pérdida de tejido cerebral y eso es fatal cuando las regiones del cerebro que controlan la respiración dejan de funcionar.
El equipo de investigadores de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Lund ha demostrado por primera vez que la inflamación que se produce en la meningitis está causada por el bloqueo del sistema glifático.
"Cuando las células inmunes entran en el cerebro se comen las bacterias, pero mientras lo hacen también producen componentes inflamatorios que causan inflamación", señala Maiken Nedergaard de la Universidad de Copenhague, autor principal del estudio.
Nuevos tratamientos
Este estudio abre la puerta de desarrollar tratamientos alternativos a los antibióticos para la meningitis.
"El aspecto más importante de nuestro estudio es que sugiere que la meningitis puede tratarse mediante la administración de una enzima que degrade las redes de neutrófilos".
"La eliminación de estas redes acabó con la acumulación de líquido en el cerebro, a menudo fatal, en ratas con meningitis bacteriana. Esta novedad el tratamiento se puede combinar con antibióticos si es necesario", concluye Nedergaard.
Estas redes que forman los neutrófilos y que no dejan que el líquido circule bien están formadas de ADN. Así pues, lo que hicieron los investigadores fue sencillamente darles a las ratas medicamentos que cortaran ese ADN, los llamados ADNasa.