La Reina Letizia sufre neuroma de Morton: qué es este problema del pie

El neuroma de Morton, la afección que sufre en el pie la reina Letizia, provoca un dolor intenso similar a un calambrazo. Usar zapatos de punta estrecha o de tacón muy alto es la principal causa y la Reina ha empezado a dejarlos atrás en algunas ocasiones.

Actualizado a
letizia neuroma morton 4
CordonPress

La reina Letizia ha usado diferentes tipos de tacones durante los actos por el funeral del rey Constantino de Grecia.

Eva Mimbrero
Eva Mimbrero

Periodista especializada en salud

Un dolor agudo en el antepié que aparece de repente, como un calambrazo. Este es el síntoma principal del neuroma de Morton (llamado también neuroma interdigital o plantar), el trastorno que le han detectado en el pie izquierdo a la reina Letizia y que se suma a la metatarsalgia crónica que padece desde hace años, por lo que el dolor en el pie es aún mayor.

Desde el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) nos explican por qué aparece esta patología, su tratamiento y cómo reducir el riesgo de sufrirla.

Qué es el neuroma de Morton

El neuroma de Morton es una tumoración benigna o engrosamiento del tejido alrededor de uno los nervios que discurren por los lados de los dedos de los pies. Normalmente suele aparecer entre el tercer y cuarto dedo.

Es un trastorno poco conocido pero relativamente frecuente, sobre todo entre las mujeres, con una prevalencia del 30%.

usar Tacones altos: principal causa de neuroma de morton

El neuroma de Morton aparece debido a la compresión de alguno de los nervios que conectan la planta del pie con los dedos. Es mucho más probable que esto ocurra si se usa de forma frecuente un calzado que comprime la zona, como los de punta estrecha, o que provocan que la presión que debe soportar sea mayor, como ocurre con los de tacón alto. Al no disponer de espacio suficiente, el roce entre el nervio y las estructuras que lo rodean es constante, y esto genera inflamación y dolor.

Otras causas de neuroma de morton

No solo determinados zapatos influyen en esta dolencia:

  • Sufrir juanetes o dedos en garra también aumenta el riesgo. "La deformación de los dedos de los pies puede acabar comprimiendo alguno de los nervios responsables de esta alteración", aclaran desde el colegio de podólogos valencianos.
  • Apoyar mal el pie al caminar es otro de los posibles desencadenantes."En concreto, realizar más apoyo en la zona lateral del pie, cargando todo el peso del cuerpo en ella y realizando mucha menos descarga en el primer dedo", advierten.
  • Algunos deportes como el atletismo en el que el pie puede sufrir lesiones repetidas, o el esquí o la escalada en los que se llevan zapatos ajustados aumentan el riesgo de neuroma de Morton.

Síntomas del Neuroma de Morton

  • El dolor que genera es uno de los síntomas más característicos y fáciles de identificar de esta neuropatía. Es un dolor muy molesto porque es de tipo eléctrico, como el que podemos sentir cuando nos damos un golpe en el codo.
  • Al igual que ocurre en el caso del codo, el dolor del neuroma de Morton suele ir acompañado de una reacción corporal de movimiento brusco.
  • Otros síntomas asociados a esta dolencia son sentir ardor, hormigueo o entumecimiento en los dedos afectados por la compresión del nervio, que suele aliviarse al descalzarse y masajear la zona.

Diagnóstico del neuroma de morton

Ante la sospecha de que un neuroma de Morton es el origen del dolor, el podólogo suele explorar y palpar la zona en busca de un bulto o puntos que duelan al presionarlos. También puede valorar la posibilidad de hacer una ecografía de la zona, para obtener una imagen de cómo están las estructuras del pie por dentro.

Cómo se trata el neuroma de Morton

Una vez confirmado el diagnóstico, la recomendación principal es cambiar de calzado si este ha sido el que ha propiciado la neuropatía.

Lo ideal es que la punta del zapato respete el ancho natural del pie y el tacón no sobrepase los 3-4 cm de altura, recomiendan los podólogos valencianos.

Si esto no es suficiente, o si el calzado no ha sido la causa que ha provocado el dolor, el uso de plantillas adaptadas a cada caso puede reducir la fricción (y, con ello, las molestias).

Cuando estas medidas no bastan, puede ser necesario realizar infiltraciones en la zona para desinflamar el nervio y evitar el dolor. Por último, hay casos (aunque no es lo más común) en los que se recurre a la cirugía para descomprimir el nervio.