Sentarte en el suelo corrige los efectos negativos de las malas posturas.
Pasar muchas horas sentado en una silla o en el sofá aumenta el riesgo cardiovascular pero hay una forma de hacerlo que tiene muchos beneficios para la salud si lo haces 15 o 30 minutos cada día: sentarse en el suelo con las piernas cruzadas.
En un artículo publicado en la revista norteamericana Time, el Dr. Kelly Starrett, autor del libro Built to Move, analiza las bondades de este hábito que se encuentra entre los 10 más saludables para conservar la forma física y frenar en envejecimiento.
¿Por qué es tan bueno sentarse en el suelo?
Starrett, que fue remador profesional de aguas bravas y ganó tres campeonatos mundiales con esta disciplina, asegura que sentarse en el suelo compensa los efectos negativos que provoca en el cuerpo sentarse en una silla, en el sofá o en el coche.
"Nuestros cuerpos están diseñados para sentarse en el suelo. Cuando te sientas en una silla de la forma tradicional en ángulo recto durante horas día tras día, la relación entre los huesos de la parte superior del muslo, la pelvis y las articulaciones de la cadera se altera para mantener el torso estable", apunta el experto. Para compensar el problema, el cuerpo utiliza los músculos largos de la espalda y las piernas, pero los esfuerzos de esos músculos pasan factura ya que tiran de la columna vertebral provocando molestias. Por eso cuando te levantas de una silla después de pasar mucho rato sentado te duele la parte baja de la espalda.
Pasar un rato sentado en suelo sobre el parqué o la alfombra todos los días ayuda equilibrar todos esos huesos, articulaciones y músculos que se descompensan por pasar mucho tiempo sentado en ángulo recto.
¿Tienes facilidad para sentarte y levantarte del suelo?
Pero pasar media hora al día sentado en el suelo no solo es bueno para compensar los efectos de las malas posturas. También es un entrenamiento para levantarte del suelo con agilidad y sin necesidad de apoyarte en nada. La facilidad para hacerlo se relaciona con una mayor esperanza de vida.
Lo comprobó un equipo de científicos de Brasil que sometió a dos mil personas de entre 51 y 80 años a un test sencillo que consistía en sentarse y levantarse del suelo. Se valoró la habilidad para hacerlo con una puntuación entre 0 y 10 descontando puntos si la persona se tenía que apoyarse en las manos o las rodillas o perdía el equilibrio al levantarse.
Seis años más tarde volvieron a realizar la prueba y comprobaron que había una relación notable entre la habilidad para levantarse del suelo y la probabilidad de supervivencia.
Los autores determinaron que ser capaz de levantarse con facilidad es una señal de que se sufrirán menos caídas y fracturas que en edades avanzadas pueden ser graves y también de que mejorará la salud general.
Ponte a prueba
Sentarse y levantarse del suelo sin ningún apoyo es señal de que tu cuerpo es estable, flexible y eficiente. También es señal de que tienes una buena potencia muscular (no solo fuerza), algo clave para no perder movilidad con el paso de los años.
Si tienes facilidad para hacerlo sigue practicándolo a diario y si no la tienes es cuestión de entrenamiento. Starrett recomienda seguir estos pasos para aprender a sentarte y levantarte del suelo sin ningún apoyo:
- Ponte de pie con un pie cruzado frente al otro.
- Sin apoyarte en nada (a no ser que te notes muy inestable), dobla las rodillas y baja hasta el suelo hasta quedarte sentado con las piernas cruzadas.
- Una vez sentado en el suelo con las piernas cruzadas, inclínate hacia delante con los brazos extendidos para mantener el equilibrio y levántate del suelo, si es posible, sin apoyar las manos ni las rodillas en el suelo. La idea es que no utilices ningún punto de apoyo.