¿Sabías que la mayoría de las personas no nos sonamos bien la nariz? Pues sí, hay una forma correcta de hacerlo que ayuda a aliviar la congestión nasal de forma efectiva y reduce los riesgos que puede provocar no eliminar bien la mucosidad.
Esto es algo importante que debemos saber ya que en invierno es muy frecuente que estemos congestionados. Te lo explicamos.
Además, seguro que has notado cómo en esta época de frío, al salir a la calle y enfrentarte a las bajas temperaturas, tu nariz empieza a gotear.
No estás resfriado, y la prueba es que al regresar a casa o entrar en un sitio cálido, la molestia cesa al momento o al cabo de poco rato. Esto es normal. Se trata de una respuesta "inteligente" del organismo para adaptarse al frío y los cambios bruscos de temperatura. Y le sucede a la mayoría de las personas. Te contamos por qué pasa.
También te desvelamos de qué nos puede alertar el color de la mucosidad.
cómo hay que sonarse bien la nariz
Cuando tenemos mucosidad debido a un resfriado o gripe, conviene tener en cuenta algunas precauciones.
- Si eres de los que "soplan" por las dos fosas nasales a la vez, debes saber que formas parte de esa mayoría de la población que se suena mal. Así lo advertía una campaña realizada hace un par de años por los colegios profesionales de fisioterapeutas de varias comunidades autónomas.
Y sonarse de forma incorrecta no solo implica la molestia de no librarse de la mucosidad, sino también un mayor riesgo de sufrir sinusitis, en caso de que las secreciones se acumulen en las vías respiratorias altas, o bronquiolitis (sobre todo en niños) o neumonía, si se concentran en las vías bajas.
Rinitis, otitis o faringitis son otras de las complicaciones que se pueden derivar del hábito de sonarse mal, según los fisioterapeutas.
Pero, ¿cómo hacerlo correctamente?
- Lo ideal es tapar primero uno de los orificios soltando el aire por el que no está bloqueado para "desatascar" bien esa fosa nasal. Si no se libera a la primera, es mejor repetir la acción varias veces que hacerlo muy fuerte.
- Cuando sentimos que hemos eliminado la mucosidad de la fosa nasal y nos entra bien el aire, hacemos lo mismo con fosa contraria.
- "Una fosa nasal debe estar completamente libre para que por ella circule el aire y arrastre la mucosidad que queremos eliminar. Si tapamos la contraria, conseguimos que este flujo aéreo se concentre en una sola fosa y el acto de sonarse sea más eficaz", explica el doctor Miguel Armengot, presidente de la Comisión de Rinología, Alergia y Base de Cráneo Anterior de la Sociedad Española de Otorrinolaringología (SEORL-CCC).
Por qué la nariz te gotea cuando hace frío
El aire en la parte posterior de la nariz suele estar a unos 26º (aunque puede llegar a los 30º) y con una humedad del 100%. Pero ¿qué pasa cuando el aire que respiramos es muchísimo más frío y seco?
Pues, como explica el investigador David King de la Universidad de Queensland (Australia), la nariz debe hacer que sea más cálido y húmedo para evitar que al llegar a los pulmones irrite las células de este órgano.
Según este científico, el aire frío que respiramos estimula los nervios que hay dentro de la nariz, los cuales envían un mensaje al cerebro. Y este responde a la señal aumentando el flujo de sangre hacia la nariz. Entonces los vasos sanguíneos se dilatan y calientan el aire que pasa a través de la nariz.
Pero la "maquinaria" es aún mucho más eficiente. Si el aire, además de frío, es seco, la nariz se activa para producir más secreciones a través de las glándulas mucosas. Y, gracias a ellas, proporciona la humedad necesaria al aire que inhalamos.
Cuando este complejo mecanismo de compensación es demasiado activo, el exceso de líquido gotea por nuestra nariz. Los expertos calculan que en este proceso podemos llegar a perder hasta 300-400 mililitros de agüilla al día.
Lo que nos dice el color de los mocos
El tipo de mucosidad nasal puede ser clave para conocer su causa. El doctor Armengot nos cuenta de qué nos puede avisar el color de las secreciones:
- Un moco claro, como el agua, orienta a una causa alérgica o al inicio de una infección vírica.
- La mucosidad blanquecina y abundante (mucoide) es típica de la segunda fase evolutiva de las infecciones víricas. Sucede unas 72 horas tras la infección, después de una rinorrea acuosa.
No es igual si la infección es vírica o si es bacteriana
- Cuando la mucosidad está "coloreada", es decir, es amarillo-verdosa o marrón, es signo de una infección bacteriana, por lo que el médico puede prescribir tratamiento con antibióticos.
"A menudo, la mucosidad se colorea tras una rinorrea acuosa y mucoide de origen vírico porque se sobreinfecta por bacterias", explica el doctor Armengot.
Cómo aliviar la congestión nasal
El especialista aclara que hay que conocer la causa para tratarla: "Si es un problema agudo o corto habitualmente se debe a un catarro nasal o una rinitis alérgica", afirma. Pero hay algunas cosas que podemos hacer para aliviarnos:
- Sonarnos frecuentemente.
- Evitar la posición de decúbito supino (acostado totalmente sobre la espalda). Para ello, es recomendable elevar la cabecera de la cama unos 30 centímetros.
- Beber abundante agua, caldos o infusiones.
Ojo con los sprays
El doctor Armengot avisa de que el uso de descongestionantes nasales en spray, aunque es eficaz, comporta peligros: "Sube la presión arterial, acelera el pulso cardiaco y produce dependencia. Además, nunca deben usarse más de 5 días seguidos ni más de dos veces al día. Si la congestión nasal es crónica, se debe consultar con el médico".
Mejor suero salino o agua de mar
El experto nos explica que el uso de preparados con suero salino o agua de mar es eficaz en las rinitis y sinusitis crónicas, menos en las agudas.
"Los lavados nasales deben hacerse con sueros de composición similar al agua de nuestro cuerpo, como el suero fisiológico y todas sus variantes de aguas de mar", cuenta. Y añade que la presión debe ser suave y conviene sonarse tras los lavados para eliminar las secreciones nasales.
Los lavados nasales se deben hacer suavemente y luego sonarse
Pero advierte: "En los niños de menos de 4 años usaremos lavados nasales solo a muy baja presión, muy suaves, ya que pueden ser la causa de otitis medias agudas y de repetición".
Cuándo ir al médico
El doctor Armengot asegura que es necesario acudir al médico en los siguientes casos:
- Cuando la congestión nasal es evolutiva (es decir, aparece y va aumentando), fuera de un episodio de rinitis o alergia.
- Si es permanente y/o se acompaña de otros síntomas.
- Si afecta a un solo lado de la nariz, ya que podría tratarse de un tumor.
- Cuando además se produce sangrado nasal.
Si la congestión es permanente o tienes otros síntomas, no lo dejes pasar
- Si el moco es marronáceo y/o maloliente.
- Si además hay dolor en alguna parte de la cara, hinchazón en el rostro y/o el ojo, o trastornos de la visión.
- Cuando se acompaña de dolor en alguna pieza dentaria.
- Si se sufre además una cefalea intensa.