Los controladores de élite, la esperanza que muestra que se puede derrotar el VIH

Han pasado 40 años desde que se detectó el Sida en España. Hoy la infección del VIH, el virus que lo provoca, se puede controlar con medicación. No hay vacuna pero la esperanza son pacientes que se han contagiado y han podido con el virus, los ‘controladores de élite’.

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Los controladores de élite, la gran esperanza que demuestra que se puede derrotar el VIH
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Pablo Cubí
Pablo Cubí del Amo

Periodista

El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (sida) hace 40 años que llegó a España, que llenó titulares y que empezó a matar a miles de personas.

Hoy el VIH, el virus del sida, está controlado en occidente. Se puede frenar con medicamentos antirretrovirales. Pero no es la solución. Obliga a tomar una pastilla diaria de por vida.

Olvidarla supone que el VIH, que queda latente, reaparezca con la misma fuerza del primer día. Varios olvidos acaban afectando al sistema inmunitario”, explica la doctora Beatriz Mothe del servicio de infecciosas del Hospital Germans Trias i Pujol.

La cura definitiva no es una quimera. De hecho, hay pacientes que lo han conseguido. Los médicos los llaman los controladores de élite.

Dos pacientes eliminan el VIH

Hay personas que han adquirido el VIH y lo han mantenido a raya toda su vida sin necesidad de tratamiento médico”, añade la doctora Mothe.

Esas personas, cinco de cada mil infectados, consiguen que su sistema inmune frene el avance del virus. No lo hace desaparecer. El virus sigue agazapado en algunas células, pero no puede desarrollarse.

Un pequeño grupo de infectados logra mantener a raya el virus sin medicación

Pero hay dos casos muy especiales. Dos de esos controladores de élite puede haber ido un paso más allá y haber conseguido deshacerse del todo del VIH.

  • La primera es una mujer de San Francisco, que se contagió en 1992. El caso se publicó en 2020 en la revista Nature.
  • El segundo es una argentina de 31 años, contagiada en 2013, y que solo tomo antirretrovirales medio año, durante un embarazo, para asegurar que el virus no pasara al feto. Su caso aparece en la revista Annals of Internal Medicine.

Los análisis no han encontrado rastro del virus. También es verdad que son solo dos casos y puede ser un error de análisis. No es fácil descubrirlo si no se manifiesta la proteína viral.

Objetivo: enseñar a las defensas

En cualquier caso estos controladores de élite son un camino muy prometedor de tratamiento.

El virus VIH puede pasar años escondido. Externamente, las células infectadas son iguales a las otras.

La estrategia es ayudar al sistema inmune a reconocer esas células infectadas”, explica el doctor Julià Blanco, del Instituto de Investigación del Sida, durante un debate de la Fundación “la Caixa”.

¿Cómo se consigue? Con vacunas.

  • Pueden ser unas vacunas preventivas, enseñando a los anticuerpos a parar el virus.
  • O vacunas terapéuticas, que ayuden a que el virus se exprese y el sistema inmune lo localice.

Llevamos 40 años de fracasos para vacunar, pero no significa que sean años perdidos. Ya sabemos qué anticuerpos específicos bloquean el virus. Estamos algo más cerca. Creo que a lo largo de mi carrera veré la vacuna”, opina la doctora Mothe.

En qué fase está la vacuna

El problema es que el virus muta muchísimo. “Casi podríamos decir que cada infectado tiene un virus diferente”, añade el doctor Blanco.

Por eso las vacunas no tendrán nada que ver con las clásicas que conocemos.

  • Ahora mismo hay una vacuna prometedora, llamada Mosaico, que está ya en fase tres, probándose con miles de personas.

Mosaico combate esa diversidad recogiendo variantes de todo el mundo e incorporándolas.

La vacuna Mosaico recoge variantes de todo el mundo y está ya en fase 3

Una primera ensayo en mujeres ha fracasado. Hay otro ensayo, en hombres que, por sus características diferentes de forma de contagio, puede tener más éxito. Habrá resultados en 2023.

Cómo está la pandemia de sida

En occidente tentemos una falsa sensación de que el sida se ha acabado, gracias a los retrovirales.

Si se detecta temprano la esperanza de vida del pacientes es prácticamente igual a la de cualquier otra persona”, admite la doctora Mothe.

El problema es que casi un 45% de casos se detectan tarde. La mayoría son homosexuales con conducta de riesgo que cuando se van a hacer análisis es ya porque ha aparecido una infección.

Esas personas, pese a que se frene el sida, tienen el sistema inmune afectado por el virus y menor esperanza de vida.

  • En España cada año se diagnostican 3.500 casos nuevos.
  • Se estima que hay unas 150.000 personas infectadas y aún un 13% lo ignora.

Nada comparado con el drama de África. Allí el sida sigue haciendo estragos a millones. El paciente mayoritario en el continente africano es mujer y joven.

Queda camino por recorrer para ofrecer tratamientos y soluciones a todas, pero al menos se avanza.