6 trucos para cocinar mejor al papillote

Cuantas más veces al mes recurras a esta técnica, más te aseguras de aprovechar todos los nutrientes de los alimentos y de tomar pocas grasas. Descubre cómo se hace, con qué alimentos y tipos de guarnición.

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Nuria Blasco

Periodista

Exponer cualquier alimento al calor destruye parte de sus vitaminas y minerales, pero hay métodos de cocción que respetan mucho mejor esas cualidades. Y el papillote es uno de ellos.

De hecho, te recomendamos que te plantees hacer muchos de tus platos semanales de esa forma, porque así te aseguras, además, que estás tomando poquísimas grasas.

Papillote, delicias sanas exprés

El papillote combina el horneado, el braseado y la cocción al vapor. Con el calor del horno, los alimentos que pondremos envueltos herméticamente en papel vegetal o sulfurizado o en envases especiales de silicona, sueltan su jugo. El resultado es:

  • Una cocción saludable. Si el alimento tiene poco jugo en su interior, se brasea; y si es más jugoso se hace al vapor. En ambos casos se conservan intactos los nutrientes y vitaminas.
  • Platos ligeros. No hace falta añadirles casi grasa, por eso tienen pocas calorías y son fáciles de digerir.
  • Recetas con más sabor. Los jugos de los ingredientes, al quedar “encerrados” en la cámara formada por la envoltura, no se volatilizan y su sabor y aroma no se pierden, como sí sucede con cualquier otra forma de cocción. Además su textura es más tierna que los alimentos asados o hervidos.

Trucos para este tipo de cocción

Puedes preparar verduras al papillote o elaborar platos combinando carne, pescado o incluso fruta. Pero para que te queden perfectos, debes tener en cuenta estas recomendaciones:

  • Los ingredientes que incluyas en cada paquetito deben necesitar un tiempo de cocción similar. Si alguno es más duro, es mejor sofreírlo o cocerlo antes.
  • Hay que evitar los alimentos muy blandos, ya que pueden deshacerse, o demasiado duros.
  • Además, es importante pelarlos y cortarlos a un tamaño similar, evitando los trozos muy grandes o gruesos. Solo de esta forma se consigue que todos queden en su punto.
  • Antes de introducir el pequetito en el horno, vigila que el alimento quede holgado pero con el paquete cerrado de manera hermética, ya que el vapor debe circular por el papillote pero sin salir al exterior.
  • Puedes servir los alimentos directamente con el paquetito para que, al abrirlo en la mesa, se desprendan todos sus aromas.
  • Una forma de saber si se ha terminado la cocción es ver que el papillote está completamente hinchado.

Si quieres cocinar pescado

Te quedarán especialmente jugosos el salmón, la merluza o el lenguado. Casan bien con los pimientos, la cebolla, la zanahoria y los champiñones. No obstante, también puedes prepararlos simplemente añadiendo unas hierbas aromáticas y un chorro de zumo de limón.

Para elaborar platos de carne

Elige las más tiernas como el pollo, el pavo, el solomillo de cerdo, etcétera, y mézclalas con pimientos, cebolla y patatas, que son el acompañamiento ideal para estos platos. Incorpora un poco de vino para que quede más jugosa.

Recetas con fruta

Puedes hacer deliciosos postres con, por ejemplo, mangos, fresones, naranjas y mandarinas, plátanos... Añade también una cucharadita de miel (en vez de azúcar) y unas hojitas de hierbabuena.

Paso a paso para un resultado óptimo

  • En su punto de cocción. Suelen estar listos en una media de 15 minutos (desde que se hincha el papel) en el horno a unos 180ºC. Aunque ten en cuenta que si el alimento es más “duro” necesita más tiempo.
  • Envoltorios naturales y vistosos. Hay quien, en lugar de papel sulfurizado, emplea para sus papillotes hojas vegetales: de lechuga, de parra... Si usas papel, prueba a sellar los bordes untándolos con clara de huevo. Así no se escaparán los jugos.
  • Más fácil... También es posible cocinarlos en el microondas, igualmente a temperatura media. Ahorra algo de tiempo, pero las recetas suelen quedar más sabrosas al horno. Sirve, asimismo, una sartén tapada.

Dos recetas al papillote

A modo de ejemplo, te presentamos un par de recetas que puedes preparar al papillote.

Merluza con ricotta

Ingredientes para 4 personas:

8 filetes de merluza finitos / 4 zanahorias / 2 calabacines/ 4 “lonchas” de queso ricotta / 1 limón / Sal / Pimienta / Perejil / Aceite de oliva / Mantequilla

Cómo prepararlo:

  1. Pela y corta las zanahorias y los calabacines en tiras finas y anchas. Prepara cuatro hojas de papel sulfurizado, untándolas con algo de aceite por dentro.
  2. Coloca sobre cada uno un “lecho” de las verduras, encima un filete de merluza, sobre él una loncha de ricotta, luego otro filete y más verduras después.
  3. Riega con un poquito de zumo de limón, salpimienta y corona con una cucharadita de mantequilla y un poco de perejil.
  4. Precalienta el horno a temperatura media. Cierra los papillotes asegurándote de que no puedan abrirse con el calor y hornea unos 20 minutos. Sirve sin retirar el papel.

Verduras a las finas hierbas

Ingredientes para 4 personas:

12 ramilletes de brócoli y 12 de coliflor / 2 pimientos rojos / 2 calabacines / 2 cebollas grandes / Aceite de oliva / Sal / Pimienta / Finas hierbas

Cómo prepararlo:

  1. Pela, lava y corta todas las verduras en trozos no muy gruesos. A continuación corta cuatro rectángulos de papel sulfurizado y vierte en su interior un chorrito de aceite.
  2. Coloca encima de cada uno una mezcla de todas las verduras, salpimienta, adereza con las finas hierbas y vierte otro chorrito de aceite.
  3. Cierra los “paquetes” sellando bien los bordes. Hornea a 225° C durante unos 15 minutos.
  4. Sirve inmediatamente los “sobres” cerrados. Deja que cada comensal lo abra en el momento de consumir.