Seguramente ya los has visto en las estanterías de tu supermercado habitual... y el interés por ellos no deja de crecer. Una muestra es que las grandes superficies cada vez ofrecen una oferta más amplian.
Kale, chía o quinoa son algunos de los productos que están dejando de ser rarezas y, poco a poco, se están introduciendo en nuestra dieta. Son alimentos, todos del reino vegetal, que han llegado de China, Japón o Latinoamérica para quedarse. Porque son sabrosos y, especialmente, porque atesoran gran cantidad de nutrientes.
Si todavía tienes algunas dudas, puedes iniciar con alguna semilla e incorporarlas poco a poco en tus recetas. Prueba y selecciona las combinaciones que más te gusten. Son ideales para enriquecer los platos de toda la familia.