La Escherichia Coli es un microorganismo que forma parte de la flora bacteriana de nuestro intestino. De modo que, no solo no es peligrosa, sino que nos ayuda a absorber algunas vitaminas para que luego pasen al resto del organismo.
El problema es que hay ciertas variantes de esta bacteria y algunas cepas que sí son nocivas, e incluso muy peligrosas, como sucedió en un caso de pizzas contaminadas con la bacteria en Francia, que provocó intoxicaciones graves e incluso muertes entre los infectados.
La E. Coli patógena más común es la E. Coli Enterohemorrágica (EHEC), que puede causar síntomas graves, como diarrea con sangre y dolor abdominal.
La E. Coli causa una infección apenas te contaminas con una pequeña cantidad. En este sentido, es diferente a la mayoría de bacterias que causan enfermedades. Por eso se ha de poner mucho cuidado a no darle la mínima oportunidad de entrar en nuestro organismo.
Si tienes síntomas como diarrea sanguinolenta, fiebre, vómitos o dolor abdominal después de consumir alimentos potencialmente contaminados, busca atención médica de inmediato, ya que la infección por E. Coli puede ser grave en algunos casos.
Cuáles son los síntomas de E. Coli más comunes
El periodo de incubación suele durar entre 24 y 72 horas aproximadamente, y comienza con dolores abdominales y una diarrea intensa. Normalmente los afectados no presentan fiebre (o esta es muy leve) ni vómitos.
- La enfermedad suele remitir en unos días y, si se trata correctamente, no presenta complicaciones ni deja secuelas.
- Sin embargo, algunas cepas particularmente peligrosas, como la Escherichia coli O157:H7, pueden causar cólicos abdominales intensos, diarrea aguda y vómitos, incluso sangre en las heces.
Ahora bien, en el caso de que te hayas contaminado, la Dietista-Nutricionista, Sonia Ruiz, del Centro Médico Teknon y Clínica Mi Tres Torres, ha recogido en esta galería los alimentos en lo que hay más riesgo de contraer E. Coli y que no se recomiendan ingerir si ya estamos infectados.