El 46% de los españoles desconoce que existen varios tipos de cerdo. Pero entre los paladares más exigentes destaca siempre el ibérico en primer lugar, según una reciente encuesta sobre consumo. Y es que con esta variedad se elaboran los productos más jugosos, de sabor más delicado y más saludables.
El secreto del sabor de los ibéricos
Solo en España se cría el cerdo ibérico, una raza que crece en libertad y se alimenta de bellotas en los bosques de encina, lo que determina el peculiar sabor de su carne.
Además de bellotas, este cerdo come raíces y hierbas, de manera que mientras busca el alimento hace ejercicio, retardando su engorde, fortaleciendo sus músculos y consiguiendo que la grasa se infiltre más. Por eso su carne es más jugosa.
Pero no todos los productos ibéricos son iguales: hay diferencias, según lo que el animal coma durante la época de montanera, es decir, el tiempo que transcurre desde noviembre hasta febrero.
Cuántos tipos de productos ibéricos existen
- Ibérico de bellota o terminado en montanera. El cerdo se alimenta aprovechando los productos de la dehesa (paraje ecológico donde vive libremente), principalmente de la bellota y los pastos.
- Ibérico de recebo o terminado en recebo. Se ceba al animal con pienso compuesto de cereales o leguminosas. Este recebo se hace a los animales que han sufrido un retraso en el crecimiento y es necesario suplementarlos una vez ha terminado el periodo de montanera.
- Ibérico de cebo. El engorde se realiza a base de pienso compuesto.