Hipotiroidismo: los alimentos prohibidos y permitidos para regular la tiroides explicados por una nutricionista

Para controlar el hipotiroidismo es fundamental tomar bien la medicación, pero también conviene realizar cambios en la dieta como eliminar o reducir el café, el azúcar, la soja o el gluten.

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María Real Capell
María Real Capell

Farmacéutica, nutricionista y psiconeuroendocrina

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

Alimentos prohibidos y permitidos para la regular el hipotiroidismo
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Aumentar el consumo de algunas vitaminas y minerales y reducir el azúcar o el gluten ayuda a controlar los síntomas de hipotiroidismo.

En el control del hipotiroidismo provocado por la enfermedad de Hashimoto, el más común, es imprescindible tomar la medicación (levotiroxina sódica) en la dosis que nos indique el médico. Pero la dieta también es un pilar clave que nos ayudará a no restar eficacia al fármaco y a controlar esa producción anómala de anticuerpos que genera el cuerpo contra la glándula tiroides.

La enfermedad de Hashimoto es una patología autoinmune en la que el sistema inmunitario ataca la tiroides. Esto provoca una reducción de hormonas tiroideas (T3 y T4) y una elevación de la hormona TSH (el rango normal en analíticas es de 0,5 a 2,5, pero en el hipotiroidismo está por encima) que se dispara para alertar al cuerpo de que faltan hormonas tiroideas.

Una reacción que provoca los síntomas habituales de cansancio, falta de concentración, alteraciones menstruales, caída de cabello, estreñimiento, anemia o aumento de peso (entre 3 y 4 kilos).

El hipotiroidismo afecta a un 10% de la población, y especialmente a las mujeres en una proporción de 3 mujeres afectadas por cada hombre.

María Real Capell, farmacéutica, nutricionista y psiconeuroendocrina, nos explica cómo la dieta nos puede ayudar a mejorar los síntomas.

Alimentos prohibidos si sufres hipotiroidismo

Hay una serie de alimentos que conviene evitar o reducir si la tiroides trabaja demasiado lento.

  • Café.
  • Gluten.
  • Soja y derivados.
  • Azúcar.
  • Aceites vegetales que no sean de oliva.
  • Embutidos y carnes procesadas.
  • Sal.
  • Algas.

Máximo un café al día

Tomar varios cafés al día para combatir el cansancio propio de esta enfermedad es negativo por partida doble:

El café aumenta la permeabilidad intestinal, algo que no conviene en personas que sufren un trastorno autoinmune porque podría empeorar los síntomas. Si la barrera intestinal se daña pueden pasar más sustancias dañinas a la sangre que activarían aún más al sistema inmune, haciendo que genere aún más anticuerpos contra la tiroides.

También altera el ciclo del cortisol (una hormona necesaria para sentirse activo) que ya de por sí está desregulado en una persona con hipotiroidismo, por tanto no conviene alterarlo más.

Nada de gluten

Está demostrado que una enfermedad autoinmune suele llevar a otra. Por eso muchos celíacos sufren también hipotiroidismo.

"Pero aunque las pruebas de celiaquía sean negativas, se ha visto que muchas personas con sensibilidad al gluten no celíaca también tienen hipotiroidismo", señala María Real.

E incluso aunque no exista esta última alteración, conviene evitar el gluten, recuerda la nutricionista.

La razón es que el gluten pone en marcha unos mecanismos que empeoran los síntomas de hipotiroidismo:

Un sistema inmunitario "tocado" percibe el gluten como un antígeno a atacar. Pero no solo eso, también lo confunde con la glándula tiroides, con lo que es un estímulo para generar anticuerpos contra ella.

Por eso, cuando el paciente retira el gluten de la dieta bajan los anticuerpos que se producen en la enfermedad de Hashimoto.

Recuerda que el gluten está presente en cereales como el trigo, la cebada, el centeno, la espelta o el kamut.

Conviene sustituirlos por trigo sarraceno, arroz, quinoa o teff (un cereal rico en minerales y sin gluten).

Los productos a base de maíz, aunque sean aptos para celíacos, no deben tomarse porque este cereal es inflamatorio y altera la permeabilidad intestinal.

Soja y derivados no convienen

La salsa, el queso o los yogures de soja inhiben la actividad de la tiroperoxidasa, una enzima necesaria para el correcto funcionamiento del tiroides.

De hecho, la soja también bloquea la acción del fármaco para la tiroides (levotiroxina sódica).

reduce el Azúcar

El azúcar es inflamatorio. Y cuando hay una enfermedad autoinmune lo primero que hay que hacer es reducir la inflamación.

Por eso el consumo de ultraprocesados puede provocar este tipo de enfermedades.

La razón es que el ambiente inflamatorio daña las paredes del intestino, y por ellas se cuelan sustancias a la sangre que favorecen la resistencia a la insulina y desregulan muchas otras funciones del organismo.

"La base de toda enfermedad autoinmune es inflamatoria", recuerda María Real.

evita los Aceites vegetales que no sean de oliva

Los aceites vegetales de girasol o colza bloquean la acción de las hormonas tiroideas. "Solo hay que tomar aceite de oliva virgen extra", insiste.

Limita Embutidos y carnes procesadas

Su contenido en nitritos o nitratos también bloquea la tiroperoxidasa, la enzima clave para el funcionamiento de la tiroides.

Solo se aconseja consumir jamón ibérico o fiambre de pavo 100% natural.

precaución con el Exceso de sal

La sal en exceso hace que se activen unas células autoinmunes (un tipo de linfocitos) en el intestino que favorecen la aparición de enfermedades autoinmunes.

De hecho, otras autoinmunes como el lupus, la artritis o el síndrome de Sjögren (se destruyen las glándulas que producen las lágrimas y la saliva) se asocian con este mismo mecanismo.

evita las Algas

Son muy ricas en yodo, por lo que no conviene tomarlas a diario (hoy en día hay snacks de algas) ya que podrían empeorar los síntomas de Hashimoto.

Lo que no hay que evitar son las crucíferas. "Existen mucha confusión al respecto pero solo hay que evitarlas cuando la causa del hipotiroidismo es la deficiencia de yodo (bocio), pero no en el caso del hipotiroidismo de Hashimoto", aclara.

Alimentos permitidos

  • Vitamina A. Esta vitamina es clave para el correcto funcionamiento de la glándula tiroides y las mucosas, por lo que ayuda a reparar la mucosa intestinal que puede estar alterada. Acelga, mango, zanahoria, huevos, brócoli y los productos de origen animal son ricos en vitamina A. El ghee (una mantequilla clarificada sin lactosa y sin caseína) también es rica en vitamina A y además mejora la mucosa intestinal por su contenido en butirato.
  • Vitamina D. En caso de hipotiroidismo, los niveles de vitamina D deben estar por encima de 40 nanogramos. Exponer la piel al sol 20 minutos al día y consumir lácteos, pescado azul y huevos contribuye a tener unos niveles idóneos, pero si hay déficit conviene tomar suplementos.
  • Zinc. Es el oligoelemento más destacado porque participa en la formación y funcionamiento de las hormonas tiroideas. Concentraciones bajas de zinc se relacionan con un nivel bajo de T3, que es la hormona tiroidea más activa. Legumbres, almendras, quinoa, semillas de sésamo y de calabaza, y carnes son fuente de zinc.
  • Selenio. Es un oligoelemento muy ligado al zinc porque participa en la conversión de T4 en T3. De hecho, la levotiroxina sódica, el fármaco para el hipotiroidismo, aporta T4 que luego se transformará en T3. Son ricos en selenio las nueces de Brasil (son una buena merienda), el marisco, los huevos, el pescado y el pavo.
  • Hierro. Su deficiencia se relaciona con un mal funcionamiento de la tiroides. Si tus niveles de hierro son bajos, la enzima peroxidasa (desencadena la creación de hormonas tiroideas) no funciona correctamente. Carnes rojas, espinacas y marisco aportan mucho hierro.
  • Aminoácido L-tirosina. En caso de principio de hipotiroidismo puede tomarse este aminoácido en forma de suplementos. Ayuda a frenar la subida de TSH. Si no funciona habría que pasar a la levotiroxina. Carne, pesados, huevos y lácteos lo contienen.

Como verás, la dieta que se recomienda para personas con hipotiroidismo es rica en carnes y pescados por la importancia del hierro y otros nutrientes. También conviene espaciar las comidas para darle un descanso al intestino y no alterar aún más la permeabilidad intestinal.

No olvides tomar bien la medicación

La alimentación no va a sustituir en ningún momento la toma de la medicación, pero sí resultará de gran ayuda. Es más, depende de lo que comamos puede que el fármaco no haga su efecto.

María Real recuerda que la levotiroxina sódica (el fármaco que reemplaza las hormonas tiroideas) debe tomarse siempre en ayunas y esperar 45 minutos para tomar el desayuno.

Y si tomas té o café debes dejar pasar al menos dos horas porque sus taninos bloquean la absorción del medicamento ya que actúan como quelante.