Las frutas ricas en betacaroteno activan la melanina.
La principal función de la melanina es proteger la piel de la radiación ultravioleta. Cuando nos exponemos al sol, se activa la síntesis de melanina en los melanocitos para evitar que la piel se queme. Y esta producción de melanina hace que se oscurezca.
La personas de piel oscura tienen más melanina, mientras que las de piel clara tienen menos. Si quieres conseguir un bronceado bonito y saludable, existen alimentos capaces de activar la melanina, este pigmento natural que le da color a tu cuerpo mientras lo protege de los rayos solares.
María Real Capell, farmacéutica, nutricionista y psiconeuroendocrina, nos descubre los alimentos que te ayudan a ponerte morena sin dañar la piel.
Plátano, legumbres y frutos secos
Estos alimentos, junto con los huevos, las semillas, la carne de ave o el aguacate son una gran fuete del aminoácido L-tirosina, que es un gran precursor de la melanina.
La L-tirosina también interviene en la síntesis de hormonas tiroideas y de catecolaminas. Unos buenos niveles de este aminoácido mejoran la vitalidad y el bienestar general, y te ayudan a ponerte morena. Ahora bien, un exceso de esta proteína puede provocar hiperpigmentaciones.
Zanahoria, tomate y sandía
El betacaroteno es el nutriente responsable de filtrar los rayos solares ultravioleta a la vez que proporciona una pigmentación dorada en la piel, por eso nos protege de las quemaduras.
Zanahoria, tomate, sandía, calabaza, melocotón, espinacas o pimiento son una gran fuente de betacarotenos. Para notar sus efectos, se aconseja aumentar su consumo al menos 15 días antes de empezar a tomar el sol. El gazpacho es muy rico en este nutriente por su contenido en tomate.
Infusiones de ginkgo
El ginkgo favorece la repigmentación y la síntesis de melanina. Su efecto beneficioso se ha demostrado incluso en personas con vitíligo.
Un estudio revela que la ingesta de 40 mg de ginkgo biloba (con un mínimo de 9,5 mg de ginkgo flavona) 3 veces al día durante 6 meses puede frenar el avance del vitíligo e incluso conseguir una repigmentación completa (se demostró en un 40% de los pacientes del estudio).
Para potenciar tu melanina y broncearte de forma segura toma 1 infusión al día de ginkgo.
Pollo Y lácteos
Las vitaminas del grupo B son claves para la piel. La protegen frente al estrés oxidativo, estimulan la renovación celular, aumenta la hidratación y mejoran la cicatrización, por eso ayudan a evitar el fotoenvejecimiento provocado por el sol.
La falta de vitaminas de grupo B se nota enseguida en la piel en forma de enrojecimiento, irritación o dermatitis.
Los cereales integrales, el huevo, el germen de trigo, las nueces, la leche y los vegetales de hoja verde son ricos en vitaminas del grupo E.
Aguacate y aceite de oliva virgen
Además de estimular la producción de la melanina, la vitamina E es un potente antioxidante que repara tu piel en caso de quemadura solar.
El aguacate, el aceite de oliva, la yema de huevo, las almendras, las avellanas o los cacahuetes son una gran fuente de vitamina E. Recuerda que el aceite de oliva debe ser virgen extra para que tenga una gran capacidad antioxidante.
Kiwi, brócoli y fresas
La vitamina C neutraliza los radicales libres que provoca el sol en la piel y aceleran el envejecimiento prematuro.
Asimismo, contribuye a la producción de colágeno que hace de sostén en la piel y previene las arrugas y la flacidez.
Todas las frutas y verduras son ricas en vitamina C, pero en especial el kiwi, el brócoli, las fresas, los arándanos, el pimiento y los cítricos.
Pescado azul
El salmón o las sardinas son otros alimentos que debes incluir en tus menús veraniegos para lucir un bronceado saludable.
Estos ácidos grasos tienen una gran acción antiinflamatoria que compensa el daño celular provocado por la radiación solar.
Sésamo
El selenio es uno de los minerales más antioxidantes que existen, por eso protegen tu piel del efecto nocivo de la radiación ultravioleta.
Puedes consumir sésamo rociando sus semillas sobre yogures o cremas. Otra opción es el tahín, un pasta de sésamo para untar. También puedes preparar gomasio moliendo semillas tostadas de sésamo con una pizca de sal y espolvorear en tus platos.
Huevos
Este mineral es esencial para la salud de la piel. Ayuda a regular la actividad de la glándulas sebáceas, contribuye a la formación de colágeno, previene la formación de radicales libres y favorece la absorción de vitaminas E y A.
La suplementación con zinc tiene un efecto antiinflamatorio e inmunomodulador que ayuda a tratar enfermedades de la piel. Los huevos, el germen de trigo, el carnes rojas o las almejas son fuente de zinc.
Marisco
El selenio es otro gran antioxidante que protege las membranas celulares, proporciona flexibilidad a los tejidos y evita el envejecimiento prematuro de la piel.
Marisco, pescado, pollo, carne roja, hortalizas, huevos, atún, ajos, champiñones y cereales integrales aportan selenio.