Los bizcochos caseros, seguramente, te recuerdan a las meriendas de la infancia. Son gustosos, apetitosos y más sanos que la bollería industrial. Por eso, y también por el gusto de darte un capricho, puedes aprovechar estos días que estamos más en casa para preparar alguno de los siguientes.
- Si convives con niños, pídeles que te ayuden. Es una buena manera de que los más pequeños de la casa se empiecen a familiarizar con la cocina y, además, pasaréis un buen rato en familia.
Elige, entre las siguientes propuestas, las que te parezcan más apetitosas y... ¡manos a la obra!