El refresco que debería ponerse de moda en España porque tiene cero calorías, quita mucho la sed en verano y es digestivo

Se trata de un refresco de toda la vida que no aporta calorías, es muy digestivo y te hidrata. Una nutricionista analiza los beneficios de esta bebida que solo debe evitarse en contadas situaciones.

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AGUA CON GAS
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El agua con gas es muy digestiva y no aporta calorías.

Dra. Anna Costa
Dra. Anna Costa

Dietista nutricionista, doctora en biología y tecnóloga en alimentos.

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

La bebida a la que nos referimos tiene fama de aligerar las digestiones y de ayudar a controlar la presión arterial. Nos referimos al agua gas. Suele pensarse que engorda más que el agua pero no es así. Analizamos las propiedades del agua con gas de la mano de la Dra. Anna Costa, dietista nutricionista y directora de Clínica de NutriClínica Doctora Costa.

Qué es el agua con gas

El agua con gas es agua con anhídrido carbónico, el responsable de sus burbujas. De hecho, este gas se añade a todo lo que tiene burbujas, como las bebidas carbonatadas, aunque en el caso del agua con gas puede estar presente de forma natural (hay manantiales que producen este tipo de aguas) o añadirse posteriormente inyectado a presión.

Los ingredientes del agua con gas natural y artificial son los mismos y los beneficios son similares, aunque las naturales son de sabor más suave aunque también son más caras.

Beneficios del agua con gas

1. Mejora la digestión

El ácido carbónico que aporta el agua con gas, sumado al pH ya ácido del estómago, aumenta la segregación de jugos gástricos y, por tanto, ayuda a digerir las proteínas de los alimentos. Imagina que las proteínas son como un ovillo de lana y los jugos gástricos las deshilachan.

2. Proporciona sensación de saciedad

Cuando bebes agua con gas, el pH ácido del estómago (entre 3 y 4 debido a los jugos gástricos) convierte el anhídrido carbónico en dióxido de carbono. Y esa conversión provoca que 'apriete' contra las paredes del estómago, haciendo que tengas cierta sensación de hinchazón. Por eso beber agua con gas te ayuda a comer menos.

"Esto puede ser positivo si la tomas a la hora de comer porque esa plenitud origina sensación de saciedad y, en consecuencia, te ayuda a comer menos", apunta la Dra. Costa, portavoz del Colegio de Dietistas-Nutricionistas de Catalunya (CoDiNuCat) y doctora en biología y tecnóloga en alimentos.

3. No engorda

Pensar que el agua con gas engorda es una consulta habitual entre muchos pacientes porque se asocia el hecho de ingerir gas con el aumento de peso. Sin embargo, que provoque distensión abdominal, es decir hinchazón, no tiene nada que ver con el aumento de la grasa corporal. Otra cosa bien distinta es que el gas ingerido provoque flatulencias en ciertas personas" asegura.

Ni el agua con gas ni el agua sin gas aportan calorías, por tanto no inciden en el peso corporal

Cuándo no conviene beber agua con gas

En las siguientes situaciones no conviene recurrir al agua con gas:

  • Si comes muy rápido, masticas poco o tragas aire al comer evita el agua con gas. Estas malas costumbres a la hora de comer provocan distensión abdominal (hinchazón), por eso en estos casos no se aconseja tomar agua con gas ya que sería un factor añadido que agravaría aún más la hinchazón.
  • Si tienes flatulencias. Si acumulas gases y te cuesta expulsarlos hay que evitar añadir más gas al aparato digestivo.
  • En caso de celiaquía, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa o intestino irritable. En todas aquellas enfermedades que afectan al intestino no se recomienda el agua con gas porque puede incrementar las molestias digestivas por mayor distensión abdominal a nivel del intestino grueso.
  • Si sufres acidez o reflujo. No se aconseja el agua con gas porque su pH es más ácido (entre 5 y 6) que as normales (pH 7), por lo que aumentaríamos aún más la acidez de estómago y el reflujo gastroesofágico.
  • Si sufres EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica). Este trastorno provoca insuficiencia respiratoria, por tanto no conviene hinchar el abdomen bebiendo agua con gas, ya que podría presionar el pulmón y dificultar todavía más una respiración ya deficiente.

Preguntas frecuentes sobre el agua con gas

1. ¿Afecta a la tensión?

La Dra. Costa asegura que hay multitud de estudios acerca de los beneficios para la salud del agua con gas, pero en la mayoría de ellos es necesario investigar más para llegar a conclusiones fiables.

"Según algunas investigaciones, es buena para la presión arterial, reducir el riesgo cardiovascular o disminuir el colesterol o los triglicéridos. Pero son estudios realizados en ratones o en muestras de población muy pequeñas que no arrojan suficiente evidencia científica", aclara la especialista.

2. ¿Perjudica el esmalte dental?

También es un mito muy extendido, pero la portavoz del CoDiNuCat asegura que habría que beber muchísima para que afectara al esmalte dental.

Es mucho peor para la salud dental el efecto de las refrescos carbonatados por sus ácidos cítricos que el del agua con gas por el ácido carbónico que aporta.

3. ¿Se puede beber agua con gas cada día?

Por sus burbujas y su sabor un tanto amargo, el agua con gas se suele beber a pequeños sorbos y no de un trago como el agua normal, por eso se toma en menor cantidad. Y no es perjudicial que esté presente en tu día a día, a no ser que tengas problemas digestivos. Anna Costa no duda al asegurar que:

Es una buena opción para completar la ingesta diaria de agua recomendada si te cuesta beber agua normal y no te gustan las infusiones. Puedes tener en la nevera agua con gas con una rodajas de limón o de naranja.

También es una buena alternativa a los refrescos. Si cada día vas a tomar algo después de trabajar, será mucho mejor que bebas un agua con gas con hielo y limón que un refresco. Incluso es mejor que un zumo de naranja (aporta bastante fructosa y glucosa porque se necesitan 3 naranjas para hacer un zumo y, además, se le quita la pulpa, con lo que no lleva fibra).

Acompañar las comidas con un vaso de agua con gas tampoco es perjudicial si te apetece y te sienta bien. Por tanto, no hay ningún problema en tomar dos o tres vasos a lo largo de todo el día.

En cuanto al aporte mineral, el agua con gas tiene el mismo contenido de sodio, potasio o magnesio que la normal.

Obviamente, si necesitas reponer una cantidad importante de líquidos porque tienes muchas sed o has hecho ejercicio, lo mejor es recurrir al agua normal.

4. ¿Las embarazadas pueden tomar agua con gas?

Sí, solo hay que vigilar la ingesta de sodio y si la gestante tiene problemas de gases. El consumo de agua con gas puede empeorar la sensación de de hinchazón. Aunque es una alternativa para aplacar la sed sin abusar de otro tipo de bebidas azucaradas.