Trucos infalibles para hacer una parrillada de pescado sin que se te pegue

Una parrillada de pescado es una alternativa más ligera, digestiva y cardiosaludable a las típicas barbacoas de carne. Te contamos cuáles son los mejores pescados para hacer una parrillada y consejos muy útiles para que no se peguen a la parrilla.

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Parrillada de pescado
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La parrillada de pescado es una alternativa más saludable a la barbacoa de carne.

Nuria Blasco

Periodista

Hacer una barbacoa es una opción deliciosa para disfrutar de una comida al aire libre con familia o amigos. La más tradicional es la de carne, pero hay una alternativa más saludable y todavía más sabrosa si cabe: la parrillada de pescado.

Puedes sustituir las morcillas, la panceta, la carne roja o los chorizos – alimentos con un gran contenido en calorías y grasas saturadas–, por deliciosos pescados y mariscos hechos a la brasa.

Doradas, lubinas, sardinas, sepia, gambas y mariscos son la alternativa perfecta para protagonizar una barbacoa equilibrada y llena de sabor.

Beneficios del pescado asado

Por lo general, el pescado es más bajo en calorías y grasas en comparación con la carne roja y las aves de corral. Por lo tanto, una parrillada de pescado puede ser una opción más ligera y saludable.

Además, la textura tierna del pescado y su contenido de grasas saludables lo hacen más fácil de digerir en comparación con algunas carnes más grasosas.

Muchos tipos de pescado son ricos en ácidos grasos omega-3 beneficiosos para la salud del corazón, ya que pueden reducir la inflamación, disminuir los niveles de triglicéridos y mejorar la función cardiovascular. También el pescado es una buena fuente de vitaminas y minerales esenciales, como la vitamina D, vitamina B12, selenio y yodo. 

Para elaborar una parrillada basada en pescado y marisco no es necesario disponer de grandes conocimientos culinarios. No obstante, aunque es  sencilla de elaborar, si no tienes en cuenta algunas consideraciones, el pescado puede desmenuzarse en la parrilla. Seguir unas pautas sencillas nos puede resultar de mucha utilidad.

Cómo evitar que el pescado se pegue a la parrilla

Uno de los problemas que nos podemos encontrar cuando elaboramos el pescado, es que este se nos pegue a la parrilla. Entonces se quema la piel y el pescado se desmenuza cuando intentamos sacarlo.

Hay algunos trucos que puedes seguir para que el pescado no se pegue a la parrilla:

  • Hay que escoger una parrilla de calidad, que sea antiadherente. Si tu parrilla ya tiene un tiempo largo de uso y los alimentos empiezan a pegarse, toca cambiarla.
  • Antes de poner la parrilla sobre las brasas, lubrícala con aceite ayudándote de una brocha e intenta mantenerla lubricada en todo momento.
  • La parrilla debe estar bien caliente antes de poner el pescado. Además debe estar libre de restos de comida que hayamos cocinado antes.
  • El pescado debe estar bien seco antes de colocarlo encima de la parrilla. Si lo has limpiado o descongelado hace poco, pásale un paño de cocina limpio o una servilleta de papel para secarlo.
  • Unta el pescado con un poco de aceite de oliva para que no se pegue, pero no lo pongas en exceso para que no caiga en las brasas.
  • Otra opción es añadir sal gruesa al pescado antes de ponerlo en la parrilla. Como con el aceite, se origina una especie de película protectora que evita que se pegue.
  • Puedes cocinar el pescado al papillote, es decir, hacer una especie de paquete con papel de aluminio colocando dentro el pescado.
  • También es importante mantener la parrilla en buen estado, limpiándola de forma adecuada después de cada uso con un cepillo de cerdas duras. Recuerda no rallarla con el estropajo o los alimentos se pegarán seguro.

¿Qué pescados podemos poner en la barbacoa?

Doradas, lubinas, sardinas, sepia, gambas y mariscos son la alternativa perfecta para protagonizar una barbacoa equilibrada y llena de sabor, gracias a la cantidad justa de grasa saludable.

Te damos algunas opciones de pescados y mariscos que quedan genial hechos a la brasa:

  • Sardinas: Nos ayudan a reducir los niveles de colesterol y los triglicéridos altos. Son una opción sana y económica, y quedan deliciosas asadas en la parrilla. Para que queden en su punto, es importante no cocinarlas demasiado para que se conserven jugosas. Y hacerlas en una barbacoa, te ahorra el olor a sardinas que queda impregnada en tu cocina.
  • Dorada, rodaballo, corvina o lubina: Otras opciones exquisitas que aportan todos los beneficios del pescado azul, con ácidos grasos Omega 3, previenen enfermedades cardiovasculares y reducen el colesterol malo. Estos pescados quedan deliciosos a la brasa, con la piel crujiente y una carne muy jugosa.
  • Salmón: Uno de los pescados más beneficiosos por su alto valor en ácidos grados Omega 3. Nos ayuda a protegernos de cardiopatías y a mantener la buena salud de nuestro cerebro. Además es muy efectivo para bajar el colesterol. Puedes poner este pescado directamente sobre la parrilla o ensartado en brochetas en forma de taquitos.
  • Gambas, langostinos y cigalas: Son una fuente de nutrientes y ácidos grasos, y que nos aportan proteínas de alto valor nutricional, necesarias para el desarrollo de unos músculos sanos. Puedes hacerlas en la barbacoa sin pelar, con sal gorda, aceite y limón, o bien insertados en brochetas con verduras. Dejadlos solo unos minutos por cada lado para que no queden secos.
  • Sepia, calamares o pulpo: Los cefalópodos son ricos en calcio, fósforo, yodo, potasio o selenio, aportan muy pocas calorías y quedan geniales a la parrilla. Después de hacerlos, puedes rociarlos con un majado de aceite de oliva, ajo y perejil.
  • Almejas, vieiras o mejillones: Tienen altas propiedades nutritivas, con vitaminas, aminoácidos y minerales muy beneficiosos para la salud. Para hacerlos a la brasa puedes usar una rejilla especial o colocarlos sobre varias hojas de papel de aluminio.

Consejos para una parrillada de pescado perfecta

Desde Crianza de Nuestros Mares –el sello de origen de doradas, lubinas y corvinas criadas en aguas de mar abierto de nuestras costas– nos dan algunos consejos para conseguir una parrillada marinera deliciosa.

  • Pide al pescadero que te prepare el pescado para hacerlo a la barbacoa, es decir, enteras, evisceradas, con piel y sin escamas.

  • Elabora las brasas con carbón ya que proporcionará un sabor más neutro a los alimentos.

  • Saca el pescado del frigorífico unos 30 minutos antes de colocarlo en la barbacoa y sazona con sal para que vaya penetrando en los lomos, mientras va alcanzando la temperatura ambiente.

  • Ásalo con brasas suaves y sin llama. Si la barbacoa tiene varios niveles, coloca el pescado en la parte más alta o intenta mantener una distancia adecuada para evitar que se queme. También se puede hacer uso de parrillas especiales para pescado.

  • El tiempo de asado va a depender del grosor del pescado. Recuerda que es recomendable darle la vuelta solo una vez.

  • Sácalo antes de que esté hecho, ya que se sigue cocinando tras retirarlo de las brasas. Pínchalo para comprobar que el color de la carne es blanco y que se despega con facilidad de la piel y espina central.

  • Puedes usar verduras como guarnición. Córtarlas finas o ponlas en la barbacoa antes que el pescado, ya que tardan más en estar al punto. Se puede acompañar de tomates, pimientos verdes, calabacín y cebollas de temporada. También unas patatas asadas a la parrilla pueden ser un buen acompañamiento.

  • Al servir, añade por encima un majado de ajo, perejil, sal y aceite para dar un toque más mediterráneo. O también puedes echarle un chorrito de limón.

  • Procura mantenerte hidratado y protégete del sol buscando zonas de sombra. Si no es posible, cúbrete la cabeza con una gorra o sombrero y ponte crema solar.