La miopía puede afectar a la presión intraocular y favorecer el glaucoma.
La miopía y el glaucoma se encuentran entre las enfermedades oculares más prevalentes y de rápido aumento que causan discapacidad visual y ceguera en todo el mundo. De hecho, el glaucoma es la principal causa de ceguera irreversible en todo el mundo.
La miopía es un factor de riesgo conocido de glaucoma. Un análisis de los estudios publicados hasta la fecha sobre el vínculo entre la miopía y el glaucoma indica que por cada dioptría que aumenta la miopía, el riesgo de glaucoma aumenta en aproximadamente un 20%. Además, el aumento del riesgo es más brusco cuando el grado de miopía es alto (más de 6 dioptrías).
¿Qué es el glaucoma y cuáles son sus síntomas?
El glaucoma afecta al nervio óptico, responsable de transportar la información visual al cerebro, y puede provocar una pérdida total de la visión si no se trata a tiempo.
Se estima que afecta a más de un millón de personas en España, aunque la mitad no lo sabe porque esta enfermedad es asintomática en sus inicios, lo que dificulta su detección temprana. También es una enfermedad que se asocia a la edad, aunque en realidad puede afectar a personas jóvenes, sobre todo si tienen miopía.
En su inicio no provoca síntomas, por eso se trata de una enfermedad silenciosa. "Hasta que no hay una pérdida repentina de la visión, fuertes dolores en el ojo o en la frente, enrojecimiento ocular, náuseas y vómitos o visión de arcoíris, el paciente no asume que algo va mal y acude al oftalmólogo", señalan desde el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega.
Por eso, el Dr. Rodríguez Calvo, responsable de la Unidad de Glaucoma del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, insiste en que es muy importante acudir a revisiones oftalmológicas periódicas, en especial las personas que tienen antecedentes familiares de glaucoma y los jóvenes con miopía para revisarles el fondo de ojo y comprobar su salud ocular.
- Un ojo miope por encima de lo normal puede tener predisposición a desarrollar otras alteraciones visuales como desprendimiento de retina, maculopatías miópicas, alteraciones del nervio óptico o glaucoma.
Glaucoma en jóvenes
Lo habitual es que el glaucoma aparezca en pacientes de más de 40 años, pero los menores de 20 años también pueden desarrollarlo, concretamente de dos tipos: congénito y juvenil.
- Glaucoma congénito. "En un 80% de los casos se suele identificar en el primer año de vida. Los bebés afectados suelen presentar lagrimeo y ojos enrojecidos, opacidad corneal y agrandamiento ocular ocasionado por el estiramiento del ojo inmaduro debido a la elevada presión intraocular. Este diagnóstico debe ser realizado por un oftalmólogo para que pueda realizar una exploración completa, y en ocasiones es necesario efectuar la exploración bajo sedación", explica el oftalmólogo.
- Glaucoma juvenil. Tiene una incidencia de 1 por cada 300.000 personas menores de 20 años. "Suele aparecer entre los 5 y 18 años, aunque puede presentarse más tarde, y habitualmente se diagnostica a jóvenes miopes", señala el Dr. Rodríguez Calvo. "En estos casos se debe ofrecer consejo genético a los individuos con la mutación causante de la enfermedad informándoles de que existe un 50% de riesgo de transmitir la mutación a su descendencia", añade el especialista.
El glaucoma juvenil presenta síntomas parecidos al del adulto, pero se considera una mayor amenaza para la visión por dos motivos: la enfermedad empieza a una edad más temprana, con lo que el nervio óptico se empieza a dañar antes, y los niveles de presión intraocular tienden a ser más altos.
La relación entre glaucoma y miopía
Otro tipo de glaucoma que también se presenta en jóvenes es el llamado glaucoma pigmentario y también está muy asociado a la miopía que acabaría derivando en un problema de la regulación de la presión intraocular.
"Este tipo de glaucoma se debe a una mala posición del iris, que puede rozar con el cristalino. Esta anatomía ocular del paciente es lo que genera la aparición de esta patología, siendo los pacientes jóvenes varones y los miopes los más afectados", explica el Dr. Rodríguez Calvo.
La asociación entre glaucoma y miopía es realmente preocupante, sobre todo por la alta incidencia de la miopía entre la población joven. No olvidemos que una mayor exposición a las pantallas y pasar menos tiempo al aire sin ejercitar la visión de lejos aumenta el riesgo de miopía.
En España, al 55,3% de los jóvenes de 18 a 34 y al 62,5% de los universitarios de 17 a 27 años es miope, de acuerdo con el estudio ‘La prevalencia de miopía en España entre la población más joven’ (2022) de la asociación Visión y Vida.