Aceite de palma: ¿qué relación tiene con el cáncer?

El aceite de palma, que abunda en muchos productos ultraprocesados, favorece la metástasis del cáncer porque provoca cambios en el genoma de las células cancerígenas que las vuelve más agresivas.

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Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud

Aceite de palma: ¿qué relación tiene con el cáncer?
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El aceite de palma provoca cambios en el genoma de la células cancerígenas y promueve la metástasis del cáncer.

El aceite de palma está presente en muchos alimentos ultraprocesados (bollería, precocinados, helados...) porque les proporciona una textura agradable y brillo. Se sabe que su consumo habitual eleva el colesterol y puede favorecer la arteriosclerosis y enfermedades cardiovasculares. Pero no queda allí su impacto perjudicial para la salud: también podría tener efectos cancerígenos y promover la metástasis, es decir, la expansión del tumor.

¿Qué es el aceite de palma?

El aceite de palma es una grasa saturada de origen vegetal y esto ya es suficiente para darle mala fama. Estas grasas van directas al hígado, que las utiliza para crear colesterol malo.

Se obtiene de la Palma Africana que se cultiva actualmente en el trópico (Asia, Sudamérica y África) y se usa en la industria alimentaria porque es una grasa sólida a temperatura ambiente; a diferencia del aceite de oliva, girasol o maíz que son líquidos.

  • Esta textura es muy útil para crear determinadas texturas más agradables a la hora de comer o para darle brillo al producto.

El problema es que el aceite de palma no se usa en estado puro, sino que se somete a altísimas temperaturas para refinarlo.

  • Se realiza un proceso de refinado a temperaturas de hasta 230º, lo que genera contaminantes químicos (ésteres) que tienen un efecto tóxico para la salud y que consumimos cuando nos comemos una galleta.

La OMS aconseja que el consumo de ésteres no debe superar los 2 microgramos diarios.

Aceite de palma y metástasis del cáncer

Investigadores del Institute for Research in Biomedicine (IRB) de Barcelona descubrieron que una dieta rica el ácido palmítico hace que las células tumorales desarrollen una especie de "memoria" celular que las vuelve más agresivas, es decir, promueve la metástasis del cáncer.

  • No hay que olvidar que el 90% de las muertes por cáncer son debidas a la metástasis, es decir, a la expansión del tumor primario a otros órganos vitales.

Identificaron una serie de marcadores de la "memoria" que deja la exposición al ácido palmítico en las células tumorales. Dicho de otra forma: un cambio que hace que las células mantengan una mayor capacidad metastática, incluso meses después de estar expuestas al ácido graso y que podría estar relacionado con una mayor capacidad de estas células tumorales para propagarse.

De hecho, en 2017 estos mismos autores publicaron un estudio señalando que el ácido palmítico se asociaba con un mayor riesgo de metástasis, pero no conocían el mecanismo. "En este trabajo detallamos el proceso, desvelamos que existe un factor de 'memoria' de la capacidad metastática y señalamos una vía terapéutica para revertirlo. Es esperanzador", explica el Dr. Salvador Aznar-Benita, investigador principal del estudio.

El aceite de palma provoca cambios en las células del cáncer

Para comprobar este efecto, los investigadores expusieron células de tumores orales y melanomas procedentes de pacientes a una dieta rica en ácido palmítico.

Observaron que tienen mayor capacidad de hacer metástasis en ratones, incluso cuando esta dieta se suministra durante un periodo muy breve de tiempo.

La razón de ello, explican los investigadores, es que el ácido palmítico provoca modificaciones en el genoma de las células metastáticas (conocidas como modificaciones epigenéticas) que son permanentes.

Esto hace que se vuelvan más agresivas de forma permanente. Los autores describen este comportamiento como una "memoria estable".

El aceite de palma es perjudicial incluso al inicio del cáncer

Los resultados indican que una dieta rica en aceite de palma sería perjudicial para el desarrollo del cáncer, incluso si tiene lugar en una fase muy inicial de la enfermedad en la que el tumor primario quizás no ha sido detectado aún.

  • Los científicos observaron que esta capacidad expansiva y colonizadora se adquiere debido al consumo de ácido palmítico (predominante en el aceite de palma), pero no ocurre así con el ácido oleico (muy abundante en el aceite de oliva) o el ácido linoleico (característico de la linaza).

Estos resultados apuntan a que la agresividad no solo tiene que ver con el metabolismo de las grasas, sino también con las modificaciones epigenéticas que se producen en las células tumorales cuando se consume ácido palmítico.

Cómo se expande el cáncer

Para que una célula tumoral pueda provocar una metástasis, primero debe desprenderse del tumor de origen, introducirse en los vasos sanguíneos o linfáticos, alcanzar otro órgano vital y sobrevivir y crecer allí.

En este estudio, los autores han identificado que una dieta rica en ácido palmítico permite a las células tumorales crear una red neuronal alrededor del tumor.

Las células tumorales más metastáticas adquieren capacidad para llamar al sistema nervioso. Entonces, la red neuronal que se forma alrededor del tumor genera un entorno regenerativo, que las células utilizan en su propio beneficio, para crecer y expandirse.

Cómo frenar la acción del ácido palmítico en el cáncer

Uno de los elementos clave en la formación de la red neuronal que favorece la metástasis son las llamadas células Schwann, que rodean y protegen a las neuronas, explican desde el IRB Barcelona.

  • Esta investigación muestra que, bloqueando a las células Schwann, por distintas vías, se inhibe la formación de esta red nerviosa, y la metástasis no se produce.

Sin duda, se trata de una nueva vía para frenar los efectos nocivos del aceite de palma si no somos capaces de eliminarlo del todo la dieta.