Se suele pensar que con la edad se encorva la espalda o que es fácil sufrir fracturas, cuando en realidad esto es síntoma de pérdida de masa ósea. Y es que a partir de los 40 años se inicia una pérdida lenta y progresiva de masa ósea que se acelera tras la menopausia. Un proceso que no provoca síntomas, no duele, y del que no te percatas hasta que se produce la primera fractura. Pero hay maneras de retrasar o evitar la osteoporosis pues hay factores y hábitos de vida y de alimentación que no relacionamos con la salud ósea y que no sospechamos que pueden afectar. Conócelos con este test.