Alerta de la OCU: si te haces un alisado de cabello, cuidado con este químico

Una melena atractiva pasa por una alimentación centrada en el cuidado del cabello, y por unos hábitos de vida enfocados a mantener su brillo y fortaleza. A partir de ahí, uno puede preferir tener el cabello liso o rizado. Es una simple cuestión de gustos, preferencias, e incluso, de la moda o tendencias del momento. 

La cuestión es que, si tienes el pelo ondulado o rizado, pero te gustaría tenerlo liso, la industria farmacéutica te ofrece infinidad de productos que pueden hacer tus deseos realidad. Las peluquerías ponen a tu disposición tratamientos específicos para alisar el cabello empleando ciertos productos cuya composición química es realmente efectiva para cumplir con lo que promete. 

Ahora bien, la composición de esos productos ha sido objeto de análisis por científicos en diferentes investigaciones. Una de las más recientes fue publicada en el New England Journal of Medicine y en su conclusión mostraba la posible asociación entre la presencia de ácido glioxílico en alisadores de cabello con un riesgo de lesiones renales.

El estudio se basaba en la experiencia de una mujer que en 2020 y en 2022 sufrió daños renales agudos después de haberse sometido a un tratamiento de alisado permanente del cabello. 

Aparentemente inofensivo

Parece difícil creer que exista una relación entre los alisadores para el cabello y un problema de salud tan importante como el sufrido por la mujer que dio pie a la investigación. Sin embargo, no es la primera vez que los ingredientes de este tipo de productos nos ponen en alerta. De hecho, el formaldehído era uno de los compuestos que formaban parte de la fórmula de los alisadores y que ya no se usa en Europa por ser un potencial carcinógeno y sensibilizante cutáneo.

En esta ocasión, tal y como explicaban los autores de la investigación, los problemas de riñones se producían cada vez que la mujer acudía a la peluquería para hacerse un tratamiento de alisado permanente de cabello. La cuestión es que comprobaron que el producto que utilizaban los profesionales contenía un 10% de ácido glioxílico. 

Tras repetir el tratamiento con ratones, los investigadores comprobaron que a las 24 horas sus riñones acumulaban cristales de oxalato cálcico, lo que se asocia con un riesgo de insuficiencia renal aguda.

Por tanto, a pesar de que todavía harían falta más investigaciones, los autores de la investigación concluyen que el ácido glioxílico podría ser responsable de lesiones renales agudas, por lo que no deberían usarse estos productos.

Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) que investigue la nefrotoxicidad del ácido glioxílico y valore la restricción de este ingrediente en el Reglamento de Cosméticos, así como la retirada del mercado de los productos que lo incluyan.

¿Qué es el ácido glioxílico?

A pesar de estar a la espera de conocer resultados definitivos, mientras, conviene estar alerta. Para ello, es muy útil saber cómo puede aparecer este químico en la lista de ingredientes en la etiqueta. Según la OCU, el ácido glioxílico también lo puedes encontrar como Glyoxylic Acid. 

La principal propiedad de este compuesto es su capacidad para alisar el cabello. Esto es posible ya que está comprobado que puede modificar la estructura química del cabello. Esta funcionalidad hace posible que no solo se utilice para el cabello, también se usa como un producto complementario del alisado, es decir, en champús o cremas de peinado. 

En peluquerías y supermercados

Hay que tener en cuenta que este ingrediente, el ácido glioxílico, no solo se encuentra en los productos empleados por profesionales en la peluquería, sino que también está en los champús y productos capilares que todas podemos comprar en el supermercado. Por eso, conviene que tú misma revises las etiquetas y compruebes la lista de ingredientes 

En este sentido, la OCU advierte que el uso de ácido glioxílico en alisadores de cabello no es raro. Sobre todo, desde la progresiva eliminación de otro ingrediente con funciones de alisado, como es el formaldehído, por considerarse una sustancia carcinógena y un sensibilizante cutáneo.

Otros tóxicos peligrosos en los centros de belleza

Además del cabello, el cuidado de las uñas también suele estar a cargo de los profesionales que trabajan en los centros de estética. Cuando acudimos a ellos, nos ponemos en sus manos con la confianza de que no corremos ningún riesgo para la salud. Y de hecho, así debería ser. Sin embargo, existen productos cuya composición podría suponer un cierto peligro para la salud. En este sentido, la Dra. Adriana Juanes, directora médica de Instituto Médico Ricart, del Centro Médico Ruber Internacional, advierte de la existencia de tres componentes que contienen la mayoría de esmaltes para las uñas, y que en grandes dosis resultan tóxicos. 

Entre los efectos negativos que pueden ocasionar, la experta destaca las erupciones e irritaciones. Incluso, en los casos más graves, podría afectar al sistema nervioso central. Los tres componentes a los que se refiere Juanes son:

• Ftalato de dibutilo (DBP).
• Tolueno.
• Formaldehído.