Tarta de torrija, el pastel con pan, leche y huevos más delicioso para Semana Santa (con vídeo)

La tarta de torrija, una delicia gastronómica típica de la Semana Santa,  se elabora con ingredientes básicos como el pan, la leche y el huevo, así que resulta facilísima de hacer. El pan se empapa en leche aromatizada con canela y cáscara de limón, luego se baña en huevo y se fríe hasta lograr una textura crujiente por fuera y suave por dentro. Toda una combinación que te resultará irresistible.

Finalmente, podrás coronar esta tarta con un toque de azúcar caramelizada. La excusa perfecta que te servirá para reunir entorno a tu mesa a familiares y amigos.

Una tarta especial

En comparación con las típicas torrijas, la tarta de torrija tiene una presentación diferente pero igualmente deliciosa. Mientras que las torrijas tradicionales son rebanadas de pan empapadas en leche, luego pasadas por huevo y fritas, la tarta de torrija fusiona estos mismos ingredientes en una preparación más rápida y duradera. La textura de esta tarta de torrija es más densa y cremosa, con capas de pan suavizadas por la leche y el huevo, creando una experiencia sensorial única que conserva la esencia de las torrijas clásicas pero con un giro innovador. Ambas opciones son veneradas en la gastronomía española, cada una aportando su propio encanto y satisfacción a los amantes de los postres tradicionales.

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receta de Tarta de torrija

Ingredientes

Con las cantidades aquí propuestas podrás hacer un pastel para aproximadamente 4 personas.

• 420 gr de pan (puede ser del día anterior)
• 150 ml de nata para montar
• 850 ml de leche
• 3 huevos grandes
• 25 gr de maicena
• 220 gr de azúcar
• 1 limón (su ralladura)
• 2 ramas de canela
• 1 cucharadita de aroma o esencia de vainilla
• Azúcar para decorar

Preparación

Paso 1. Leche y canela. Este paso consiste en aromatizar la leche, para ello tendrás que mezclar en una olla la leche con la nata para montar, el azúcar, la ralladura de limón y la canela. Calienta y remueve la preparación hasta que comience a hervir. Después cuela la mezcla (o retira las ramitas de canela y la piel del limón) y guarda.

Paso 2. Incorpora el pan. Trocea el pan que hayas elegido usar (preferiblemente del día anterior).  En una cazuela vierte la leche reservada anteriormente e incorpora poco a poco los trozos de pan. La leche se irá absorbiendo y a medida que veas que el pan se ablanda ve incorporando más trozos a la mezcla.

Paso 3. Agrega los huevos. Uno a uno incorpora los tres huevos a la mezcla de la tarta. Después añade la esencia de vainilla y la maicena. Asegúrate de mezclar bien todo durante unos minutos. Después utiliza un robot de cocina para triturar la mezcla, es importante que obtengas una masa homogénea.

Paso 4. Vierte en un molde. Prepara un molde desmontable, puede ser de 22 cms, con papel de hornear mojado y escurrido. El papel debe cubrir el fondo y laterales del molde por completo. Así evitarás que la mezcla de la tarta se pegue durante el proceso de horneado. 

Paso 5. Hornea. Lleva el molde con la mezcla al interior de un horno precalentado a 200ºC, durante aproximadamente 45 minutos con calor arriba y abajo (sin ventilador) y a una altura media. Puedes comprobar la cocción introduciendo un palillo en el centro. Si sale húmedo la tarta necesitará unos minutos más en el horno.

Paso 6. Refrigera. Deja enfriar la tarta y luego mete en la nevera durante al menos 5 horas o hasta el día siguiente. Sirve en una fuente y decora caramelizando azúcar con un soplete. Le dará un toque crujiente delicioso.