Cuando hablamos de nutrición, no podemos hacer afirmaciones absolutas. Suele decirse, por ejemplo, que picar entre horas es fatal para controlar el peso. Pero, en cambio, hay picoteos muy saludables y beneficiosos para nuestro organismo que, de hecho, lejos de impedirnos bajar de peso, pueden facilitarnos la tarea.
Es el caso del tapeo del que te vamos a hablar hoy. No solo es perfecto para controlar el peso, sino que además mejora la microbiota, reduce la inflamación, refuerza el sistema inmune e incluso puede regular los niveles de azúcar en sangre. ¿Quieres saber de qué alimento estamos hablando?
Un tapeo de lo más saludable
Si tuviéramos que diseñar el tapeo perfecto para tomar entre horas cuando queremos bajar de peso deberíamos tener en cuenta varios aspectos. Lo ideal es que fuera algo bajo en calorías, rico en fibra y con muchas cualidades nutricionales que aportaran claros beneficios para nuestro organismo.
Y de todas las opciones disponibles para este picoteo imaginario, hay un tipo de alimento que cumple con todas estas características. Tiene muy pocas calorías (por lo general), ofrece un efecto saciante duradero gracias a su alta cantidad de fibra y, además, puede mejorar considerablemente tu microbiota.
El tapeo del que estamos hablando son los encurtidos. Pepinillos, rabanitos, zanahoria en escabeche y otras tantas opciones que en tatas ocasiones vemos protagonizando el platito de tapa que nos ofrecen en bares y terrazas. Todos estos alimentos pueden convertirse en los protagonistas del picoteo perfecto, si están preparados adecuadamente.
¿Cómo deben estar preparados los encurtidos para ser saludables?
En realidad, los encurtidos que podemos comprar en cualquier supermercado o que nos sirven en un bar son saludables, pero no tanto como podrían serlo. Y todo se debe a que están preparados en vinagre. Dado su alto grado de acidez, el vinagre acaba con muchos de los probióticos que se forman durante el proceso de fermentación de los encurtidos, y estos nos interesan especialmente por sus muchos beneficios.
Por suerte, hay otra forma de preparar estos encurtidos que sí nos permite conservar buena parte de sus probióticos, como el lactobacilo, del que hablaremos más adelante. Este método de elaboración se conoce como fermentación láctica, y se realiza dejando que los vegetales fermenten en una salmuera. Es decir, una mezcla de sal y agua.
Gracias a este método de fermentación, los vegetales encurtidos pueden conservar sus bacterias beneficiosas. Estas, a su vez, pueden sintetizar un mayor número de vitaminas, lo que incrementa en el valor nutricional de los alimentos. Además, este tipo de fermentación descompone algunos compuestos complejos de los vegetales, lo que hace que sean más fáciles de digerir.
También cabe tener en cuenta que, dado que es un método tradicional y más natural de preparar los encurtidos, este tipo de elaboraciones no suele tener aditivos, dado que no requiere de conservantes artificiales. El ácido láctico que se produce durante la fermentación hace su labor como conservante natural.
¿Por qué es beneficioso comer este tipo de encurtidos?
Los encurtidos preparados en esta salmuera, como decíamos, conservan y, en muchos casos, aumentan, la calidad nutricional de los vegetales con los que se preparan. No olvidemos que, al fin y al cabo, lo que estamos consumiendo cuando comemos encurtidos son zanahorias, rábanos, pepinillos u olivas. Alimentos muy saludables que deben formar parte de una nutrición equilibrada.
Pero, además, cuando se preparan por medio de la fermentación láctica, sus beneficios se multiplican. Estos son algunos de los más interesantes a tener en cuenta.
Mejora la microbiota y la salud digestiva
Los encurtidos fermentados ofrecen una gran cantidad de probióticos. Es decir, de bacterias beneficiosas que pueden ayudar a equilibrar la flora intestinal. Esto es esencial para mantener un sistema digestivo saludable, puesto que una microbiota equilibrada facilita la digestión, previniendo problemas como el estreñimiento, la hinchazón del vientre o la diarrea, entre otros.
Además, los probióticos pueden mejorar la absorción de nutrientes y facilitan el procesamiento de ciertos alimentos.
En particular, debemos hablar de los lactobacilos, una de las bacterias más interesantes que podemos encontrar en este tipo de encurtidos. Estos probióticos, además de mejorar la síntesis de nutrientes y de cuidar de la salud intestinal, tienen un efecto positivo sobre el sistema inmunológico y pueden ayudar a prevenir infecciones urinarias y vaginales.
Hay estudios que apuntan que, además, los probióticos podrían tener un impacto positivo sobre la salud mental. Estas investigaciones se basan en la teoría de que existe una relación bidireccional entre el intestino y el cerebro. Estas bacterias “buenas” influyen de forma positiva en esta relación, mejorando el estado de ánimo y reduciendo los síntomas de la ansiedad o la depresión, muy probablemente por medio de la producción de neurotransmisores como la serotonina. Cabe destacar que esta teoría está aún por ser demostrada.
Ayuda a bajar de peso
Este tipo de tapeo es, además de bueno para la salud digestiva, un buen aliado para bajar de peso. Los encurtidos de los que estamos hablando son bajos en calorías (por norma general) y pueden ayudar a mejorar el funcionamiento del metabolismo gracias a los probióticos previamente mencionados.
Además, dado que los vegetales con los que se preparan tienen un alto contenido de fibra, este tapeo puede mejorar la sensación de saciedad, reduciendo el antojo y el hambre durante las siguientes horas.
Tiene propiedades antiinflamatorias
Algunos estudios realizados con probióticos apuntan que este tipo de bacterias también pueden contribuir a reducir la inflamación general del organismo. Este beneficio es especialmente interesante para aquellos que sufren enfermedades inflamatorias crónicas, como la artritis.
Aunque lo cierto es que, en términos generales, este beneficio es importante para todos. La inflamación constante que puede sufrir nuestro cuerpo a causa de una vida sedentaria, desajustes hormonales, la edad o el estilo de vida, puede acabar dañando los tejidos y empeorando la salud a grandes rasgos.
Pueden regular el azúcar en sangre
Los encurtidos fermentados de los que estamos hablando han demostrado mejorar la sensibilidad a la insulina,generando un efecto positivo sobre los niveles de glucosa en sangre.
Este beneficio es especialmente importante para aquellas personas que padecen diabetes tipo 2 o resistencia a la insulina, puesto que puede ayudar a mantener los niveles de azúcar estables, reduciendo el riesgo de sufrir picos de glucosa.
Tiene propiedades antioxidantes
Muchos de los encurtidos que hemos mencionado pueden aportarte, además, una buena cantidad de antioxidantes, que pueden neutralizar los radicales libres en el cuerpo, reduciendo el riesgo de sufrir enfermedades crónicas a largo plazo.