Formas de hacer ejercicio para perezosas: 10 consejos y trucos para mantenerte activa sin salir de casa

Todas nos hemos visto alguna vez en esa situación: el sofá, la tele o simplemente el no hacer nada parecen más tentadores que ponerse a hacer ejercicio. Pero lo cierto es que mantenerse activa es fundamental para tu salud física y mental. Si eres perezosa por naturaleza y te cuesta ponerte en marcha, afortunadamente existen formas sencillas de incorporar el ejercicio a tu rutina diaria sin necesidad de dedicar horas y horas en el gimnasio.

Hoy te traemos 10 trucos y consejos ingeniosos para perezosas con los que podrás compatibilizar tu ajetreado estilo de vida y el descanso con el deporte sin necesidad, en algunos casos, de salir de casa, ¡no hay excusas!

Cómo combatir la pereza para tener una vida más activa

La pereza es uno de los mayores enemigos a la hora de mantenerse en forma. Esa voz interior que nos dice "mejor lo dejo para mañana" o "hoy estoy muy cansada" puede ser muy difícil de acallar. Sin embargo, reconocerla como una barrera es el primer paso para superarla, y es importante entender que la actividad física no tiene por qué ser un suplicio, sino algo que podrá traerte muchos beneficios físicos y mentales a corto plazo. Por eso, en lugar de verla como un enemigo, conviértela en tu aliada.

Una vez que empieces a moverte y comiences a ver resultados, te resultará más fácil disfrutar del proceso y sentirte mejor. La clave está en encontrar actividades que realmente te gusten y encajarlas de forma natural en tu rutina diaria. Empieza poco a poco, sin presionarte; establece metas realistas y celebra cada logro, por pequeño que sea, ya que puede motivarte a mantenerte en movimiento. 

La clave es menos tiempo, pero más eficacia

Muchas veces caemos en la trampa de pensar que si no podemos dedicar varias horas al ejercicio, no merece la pena ni intentarlo. Nada más lejos de la realidad. Pequeños pasos diarios pueden tener un impacto mucho mayor a largo plazo que sesiones intensivas esporádicas.

Lo ideal es incorporar actividad física a tu rutina de forma regular, aunque sea en pequeñas dosis. Por ejemplo, en lugar de pasar 2 horas en el gimnasio el fin de semana, podrías hacer 30 minutos de ejercicio en casa todos los días. O en lugar de coger siempre el coche, caminar 15 minutos al trabajo un par de veces a la semana. Poco a poco, estos hábitos se irán afianzando, marcarán una gran diferencia en tu salud y bienestar y se convertirán en parte de tu estilo de vida de manera natural. La clave está en la constancia y la regularidad.

10 formas de hacer ejercicio para perezosas con poco esfuerzo

Aunque parezca que menos es nada, diez minutos de ejercicio al día pueden ser más beneficiosos que dos horas de entrenamiento ocasional, y puede ser tan fácil como incorporar a tus hábitos diarios ciertos movimientos o ejercicios compatibles con tu rutina. Te dejamos 10 maneras de ejercitarse sin esfuerzo que te resultarán atractivas y eficaces.

• Baile en casa. Ponte tu música favorita y baila durante 10-15 minutos. Es una excelente forma de quemar calorías y liberar endorfinas. ¡Incluso puedes hacerlo mientras limpias o cocinas!
• Estiramientos y ejercicios de fuerza en el sofá. Desde la comodidad de tu sofá, puedes hacer flexiones de brazos, abdominales o estiramientos de piernas y espalda. ¡Ni siquiera tienes que levantarte!
• Rutinas de ejercicio en casa. Dedica 15 minutos al día a una rutina rápida de ejercicios en casa. Puedes encontrar numerosos tutoriales en Internet que se adaptan a tus necesidades y nivel de habilidad, tanto de cardio como de fuerza o estiramientos.
• Sube y baja escaleras. En lugar de tomar el ascensor, aprovecha cada oportunidad de salir a la calle para subir y bajar por las escaleras. Es un ejercicio cardiovascular sencillo y efectivo.
• Camina durante las llamadas. Mientras hablas por teléfono, da un paseo por la casa, la terraza o en la calle si además quieres tomar el aire. o el jardín. Es una forma de sumar pasos a tu rutina y mantenerte activa aunque sea durante pocos minutos.
• Yoga o pilates en casa. Existen infinidad de vídeos y aplicaciones gratuitas que te guiarán en rutinas de yoga o pilates, dos ejercicios muy completos para tonificar y mejorar la elasticidad y flexibilidad.
• Sentadillas o flexiones mientras ves la tele. Aprovecha los anuncios o los momentos de descanso para hacer algunas sentadillas o flexiones. ¡Ni siquiera tendrás que dejar de ver tu serie favorita!
• Ejercicios de equilibrio. Practica ejercicios de equilibrio, como mantenerte sobre una pierna o caminar sobre una línea imaginaria. Esto te ayudará a fortalecer el abdomen.
• Sal a caminar. Da un paseo de 15-20 minutos al día, ya sea por el parque, el barrio o alrededor de la manzana. También puedes comenzar tu día con una caminata corta pero enérgica, para respirar aire fresco, prepararte para la jornada y disfrutar del amanecer mientras activas tu cuerpo.
• Tareas domésticas como ejercicio. Limpiar, fregar, barrer o pasar la aspiradora pueden convertirse en una oportunidad para quemar calorías. ¡Baila y muévete con más energía para mantener activo todo el cuerpo!

El cerebro y el ejercicio; beneficios que aporta el deporte a la mente

Además de los beneficios físicos, la actividad física tiene un impacto muy positivo en tu salud mental. No solo te ayudará a ser menos perezosa y ver el deporte como algo necesario en tu rutina, sino también a liberar endorfinas, que mejoran tu estado de ánimo y reducen el estrés y la ansiedad. Además, estimula la producción de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, que juegan un papel clave en el bienestar emocional.

Por otro lado, el ejercicio también mejora la función cognitiva. Aumenta el flujo sanguíneo y el aporte de oxígeno al cerebro, lo que se traduce en una mejor concentración, memoria y capacidad de aprendizaje. Incluso se ha demostrado que la actividad física regular puede retrasar el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento.

La pereza no tiene por qué ser un impedimento para una vida activa y saludable. Con estrategias inteligentes y formas creativas de ejercitarse, puedes superar la inactividad e incorporar el ejercicio a tu rutina diaria, aunque sea de forma sencilla y breve. Recuerda que, pequeños cambios, pueden marcar una gran diferencia. ¡Ya no hay excusas, es hora de ponerse en marcha!