Succionador de clítoris: 9 datos que debes saber si tienes uno

Un juguete erótico se ha convertido en toda una moda, el llamado popularmente succionador de clítoris (la marca satisfyer, la más conocida). Más allá del placer puntual que puede proporcionar, hay que tener en cuenta algunas advertencias para que lo puedas disfrutar sin que tu salud íntima se resienta.

Pablo Cubí
Pablo Cubí del Amo

Periodista

Actualizado a

succionador

Mujer en la cama

El succionador de clítoris es uno de los llamados juguetes eróticos, pensados para dar placer a la mujer.

En nuestro país se ha convertido en pocos meses en todo un fenómeno en esta gama de productos. El éxito en su promesa de provocar una reacción orgásmica rápida ha disparado las ventas.

Sin embargo, detrás de esta particular sistema de placer hay algunas dudas que vamos a intentar aclarar con la ayuda de una especialista en salud femenina.

1. EN QUÉ CONSISTE EL SUCCIONADOR

Estos juguetes estimuladores del clítoris llevan más de cinco años en el mercado. Y hay varios modelos, más o menos sofisticados (motores menos ruidosos, mejor batería, diseños más elegantes).

Se centran en la estimulación del clítoris, que es donde una mayoría de mujeres obtiene el placer.

Tienen un efecto ventosa que aumenta el riego sanguíneo del clítoris

Tiene un efecto ventosa que lo que hace es incrementar la vascularización (el riego sanguíneo) del clítoris al haber vibración y produce el orgasmo de una manera más rápida”, explica la doctora Dolores Ojeda, ginecóloga de la clínica Women's Carmona Dexeus.

2. NO TODOS FUNCIONAN IGUAL

Hay dos tipos de mecanismos para provocar la excitación. En ningún caso hay contacto directo del aparato y el clítoris.

  • Unos lanzan unas suaves ondas sónicas que favorecen la estimulación. Se coloca en la vulva. Las ondas rebotan en el propio aparato y van directas hacia el clítoris.
  • Otros absorben aire a presión que succiona el clítoris, por eso se ha popularizado este nombre genéricamente.

Estos aparatos tienen varias potencias, para subir el nivel de estimulación a medida que se va habituando a su uso y según las preferencias de la mujer. Y también los hay que combinan las dos funciones.

3. NO HAY CONTRAInDICACIÓN MÉDICA

Desde un punto de vista médico, no parece que este sistema puede tener contradicciones.

En este sentido, la doctora Dolores Ojeda es tranquilizadora: “No creemos que vaya a haber ningún problema con su utilización a corto, medio o largo plazo”.

La experiencia que ha habido hasta ahora no ha supuesto ningún motivo de alarma.

4. ¿HAY RIESGO DE INCONTINENCIA?

En ocasiones, en las prácticas sexuales, en medio de la excitación, una mujer puede dejar relajar el músculo de la uretra y que se le escape algo de orina.

Esto crea la duda de si estos juguetes sexuales podrían favorecer a la larga la incontinencia urinaria.

Bien colocado, este aparato no tiene que afectar a la uretra

La ginecóloga es tajante: “Eso es infundado. Anatómicamente el clítoris está próximo a la uretra pero separado. Este aparato se coloca sobre el clítoris. Si se coloca bien, no hay ningún efecto sobre la uretra”.

5. ¿es 'competencia' de la penetración vaginal?

Algunos sexólogos advierten que desde un punto de vista de relación de pareja, estos estimuladores del clítoris pueden suponer un inconveniente y hacer que el clítoris “se acomode” y tenga dificultades para provocar el orgasmo de otra manera.

También puede restar excitación y ganas de mantener relaciones sexuales con la pareja.

  • No obstante, también puede convertirse en un elemento participativo en la relación de pareja, como lo que es: un juguete sexual más.

6. NO GUSTA A TODAS LAS MUJERES

Como ocurre siempre en la vida. Nada es unánime. El succionador de clítoris puede suponer una decepción. Puede ser que lo pruebes y no te guste la sensación.

La manera rápida y extraña de conseguir placer puede provocar rechazo

Con estos aparatos se llega al clímax de una manera muy rápida y sin necesidad de ningún otro estímulo más y eso hay a quién le puede causar rechazo.

  • Esa excitación sin contacto, sin saber muy bien cómo se produce puede resultar extraña.

La aceptación dependerá de la sensibilidad de la mujer. De la manera en que entiende su sexualidad y la forma de conseguir placer.

Hay mujeres que no disfrutan del placer del clítoris si no incluye también la penetración vaginal, aunque las terminaciones nerviosas están interconectadas.

7. SE PUEDE USAR EN LA MENOPAUSIA

La menopausia no es un factor que pueda hacer que se desaconseje, sino todo lo contrario.

  • Según el estudio “Climaterio y sexualidad”, más del 65% de mujeres presenta alteraciones de su función sexual cuando llega a esta etapa de la vida.

Problemas como la sequedad o la disminución de deseo, pueden verse compensados por un aparato que no requiere penetración. Es una forma de placer más directa e inmediata para la mujer.

8.atención a LA LIMPIEZA

Estos juguetes sexuales, como todos, están en contacto con partes muy sensibles e internas del cuerpo.

  • El riesgo de infecciones siempre existe. Y aunque el aparato en sí no toca el clítoris, sí lo hace con la vulva. Hay que mantenerlo siempre limpio.

Los fabricantes ya te indican que es importante una buena higiene. El succionador de clítoris se puede lavar bien con jabón e incluso esterilizar.

Entiendo que colocado sobre el clítoris, que es donde se tiene que colocar, y tal como indican las instrucciones, no habrá problemas”, asegura la ginecóloga.

9. FALTAN ESTUDIOS...

El sentido común médico es que no existen peligros evidentes. Aunque lo cierto es que no hay estudios con evidencia científica del uso de este tipo de aparatos dad su reciente aparición.

Habría que esperar a que, ahora que se está extendiendo su comercialización, se haga alguno.

La popularidad de estos juguetes hace prever que se harán estudios científicos en el futuro

No podemos ser categóricos porque no sabemos ni cuál es la presión de la aspiración, ni el nivel de intensidad con que se utiliza cuando se produce el masaje”, recuerda la ginecóloga Ojeda.

Sin embargo, esto no tiene que considerarse una advertencia, sino una precaución lógica. Los succionadores de clítoris no presuponen mayores problemas en principio. “La experiencia hasta ahora acumulada es que estos aparatos son satisfactorios para las mujeres y, desde un punto de vista médico, no tiene ningún efecto adverso secundario”, resume la doctora Ojeda.