Sangrado intermenstrual o tras la menopausia: cuál puede ser la causa

Sangrar entre reglas, o después de la menopausia, no debe interpretarse como un desarreglo puntual. Lo más prudente si sangras sin tener el periodo o cuando ya has pasado la menopausia es consultar al ginecólogo.

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Sangrado entre reglas o tras la menopausia
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Eva Mimbrero
Eva Mimbrero

Periodista especializada en salud

"Los sangrados entre reglas son uno de los síntomas más frecuentes por los que nuestras pacientes consultan", nos cuenta la doctora Blanca Ferri Folch, del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario y Politécnico La Fe. Su prevalencia es de hasta un 30%, y representan hasta el 20% de las consultas ginecológicas.

Las edades más frecuentes de estos sangrados son al principio y al final de tener la regla: "el 20 % de los casos se dan en adolescentes, y más del 50 % corresponden a mujeres mayores de 40-45 años", especifica la ginecóloga.

El sangrado puede ser por un endometrio que crece demasiado

La mayoría de sangrados anormales se deben a desequilibrios hormonales que repercuten en el endometrio (que es la capa interna del útero, cuyo papel es fundamental para que el óvulo fecundado se implante).

Ocurre sobre todo cuando el óvulo no se libera. Esto hace que no se produzca progesterona y, debido a ello, el endometrio crece más de lo habitual, provocando el sangrado. El síndrome de ovarios poliquísticos puede causarlo, aunque no siempre se debe a él.

En edad fértil, además, hay que descartar el embarazo como causa de ese sangrado. Cuando el óvulo se implanta en el útero, puede provocar un pequeño sangrado vaginal.

Los kilos de más aumentan el riesgo. Esto afecta igualmente al endometrio, pero de otra forma: "las células grasas (adipocitos) producen estrógenos, y si hay un exceso en sangre, se estimula el crecimiento de esa capa", explica la doctora Ferri.

Si el sangrado pasa después de la menopausia

La hemorragia anormal no es exclusiva de la edad fértil: "después de la menopausia supone un 5 % de las consultas ginecológicas", precisa la especialista consultada.

"La causa más frecuente es la atrofia de la mucosa vaginal o del endometrio", apunta la doctora. Puede ser una de las consecuencias de los cambios hormonales que provoca la retirada de la regla.

Pero, a veces, puede haber otros trastornos detrás, tanto si el sangrado ocurre entre reglas como si lo hace después de la menopausia.

El sangrado a veces indica algo anómalo

A veces, este sangrado inesperado se produce por la presencia de pólipos, miomas o, incluso, de un tumor.

Puede ocurrir a cualquier edad, pero "hay que ser especialmente prudentes después de la menopausia, porque el cáncer de endometrio es la causa de los sangrados en esta etapa en un 10 % de casos", advierte la doctora Ferri.

Cuándo hay que ir al ginecólogo ante un sangrado inesperado

Cuando una mujer madura sangra, debe consultarlo con el especialista siempre. Y "en caso de que lo sufra una paciente en edad fértil, debe consultar si ese sangrado es frecuente, se repite en distintos ciclos, si ocurre tras las relaciones sexuales, es prolongado, abundante o si presenta algún síntoma de alarma asociado", apunta.

Otras señales de alerta que pueden acompañar a los sangrados y que justificarían la visita al médico son el cansancio excesivo, la pérdida de peso o una clara distensión del abdomen.

Fármacos que pueden estar detrás del sangrado

Los anticonceptivos hormonales a veces provocan un sangrado entre reglas. "Es algo que les sucede a la mitad de las mujeres durante el primer mes de uso (por el nuevo estado hormonal que genera), aunque en los siguientes ciclos suele resolverse por sí mismo. Si no es así, se puede modificar la pauta o el tipo de píldora", aclara la experta.

Los anticoagulantes orales favorecen las hemorragias y, por ello, pueden producir sangrados anormales. También ocurre, aunque con menos frecuencia, con los corticoides, los antidepresivos, los antipsicóticos o fármacos para frenar los vómitos.

En todo caso, ante cualquier duda acude a tu médico o ginecólogo para que valore tu situación en particular.