Los sofocos son una sensación de calor intenso que ocurre de forma repentina. Se describen a menudo como una oleada de calor que empieza en el pecho y sube hacia la cabeza generando mucho sudor, sobre todo en la zona del escote, el cuello, la cara y las axilas, aunque no hayas realizado ninguna actividad física. En algunos casos, puedes estar acompañados de palpitaciones, sensación de angustia y frío o escalofríos.
Pese a lo que se suele creer, los sofocos no ocurren a todas las mujeres que han llegado a la menopausia y tampoco pasa solo en esta etapa: unos años antes de que la menstruación se retire definitivamente ya pueden empezar a percibirse.
El origen principal de los sofocos es que se altera la autorregulación de la temperatura corporal, motivado por una bajada en la producción de estrógenos que se experimenta durante este periodo.
Plantas que alivian los sofocos
Para compensar esta bajada de estrógenos que provocan (ya hemos visto que no siempre) los sofocos, el terapeuta Javier Mansa, recomienda una serie de medidas basadas en la fitoterapia que pueden ser muy eficaces para aliviar esta sensación.
Antes de tomártelo debes consultar con un especialista ya que siempre hay que tener en cuenta si se toma alguna medicación con la que podría interactuar o si tienes patologías previas para las que algunas plantas están contraindicadas.
Las plantas recomendadas en caso de sofocos son:
- Lúpulo. Los sofocos son consecuencia directa de la falta de estrógenos. Y se ha descubierto que el lúpulo contiene un tipo de flavonoide que actúa como un eficaz fitoestrógeno (sustancia vegetal similar a los estrógenos femeninos). Dosis: de 100 a 250 mg de extracto seco, en 2 tomas.
- Salvia. Esta planta se ha utilizado siempre para aliviar los molestos calores y la sudoración que se presentan sobre todo durante la noche, por lo que te ayudará a dormir mejor. Sus bondades residen también en sus fitoestrógenos. Dosis: es más efectiva si se toma en extracto (de 350 a 900 mg al día).
Antes de tomarlas hay que consultar a un experto porque puede haber interacciones negativas
- Dong Quai. Contiene sustancias naturales con una actividad similar a los estrógenos. Esto hace que resulte de gran ayuda no solo para combatir estos calores, sino también otros síntomas como el nerviosismo, la ansiedad, las jaquecas. Dosis: Se emplean de 350 a 900 mg de extracto de la raíz al día, en 1 o 2 tomas.
- Trébol rojo. Sus isoflavonas (genisteína, daidzeína etc.) la convierten en una de las plantas imprescindibles en la menopausia. Y es que el trébol rojo ayuda a compensar la falta de estrógenos: aleja los sofocos, protege tu corazón y tus huesos. Dosis: Puedes tomar de 250 a 500 mg de extracto al día, repartido en 2 tomas.
- Soja y maca. Las isoflavonas de la soja contribuyen a aliviar los síntomas de la menopausia. La dosis es de 40 a 120 mg al día de extracto de habas de soja. Por su parte, los esteroles de la maca tienen un efecto similar. Se aconsejan 1.000 mg de su extracto. No se deben tomar si los niveles estrogénicos son elevados o se ha sufrido cáncer de mama.
Hábitos que te ayudan a combatir los sofocos
Son unos 5 minutos de sofocación, pero llegan a alterar mucho la calidad de vida de la mujer cuando los sufre de forma habitual.
Durante la sofocación se produce una dilatación de los vasos sanguíneos más superficiales y un aumento de la temperatura cutánea y del ritmo cardíaco (taquicardia). Su duración habitual es de 3 a 5 minutos y si ocurre de noche llega a alterar el sueño. La tensión arterial, al contrario de lo que pueda parecer, no se modifica.
Hay algunos hábitos que también ayudarán a reducir los sofocos:
- Reducir el consumo de bebidas alcohólicas, ya que incrementan la temperatura corporal. Por el mismo motivo, conviene evitar las bebidas calientes o el picante.
- Usa tu sentido común. La temperatura ambiente afecta a la frecuencia e intensidad de los sofocos, así que procura llevar ropa fresca y de algodón. Recupera el complemento de las abuelas: que no te falte un abanico a mano.
- Hidratarse es fundamental. Tomar unos dos litros de agua al día es básico. Lleva siempre una botellita en el bolso y bebe de forma continua.
- Deja el tabaco. Las mujeres fumadoras sufren con más frecuencia sofocos, por lo que abandonar este hábito nocivo mejorará el proceso.