Un estreñimiento pasajero lo puedes prevenir sin necesidad de laxantes, con unos pequeños cambios en tu alimentación, por ejemplo.
Dolor abdominal, inflamación, sensación de hinchazón… El estreñimiento, a pesar de ser una alteración leve, puede provocarte estos molestos síntomas que en ocasiones alteran mucho la calidad de vida y no es extraño que incluso tu humor se vea afectado.
Si se trata de un estreñimiento pasajero, puedes prevenirlo sin necesidad de laxantes (pueden provocar efecto rebote) con unos pequeños cambios en tu día a día como la ingesta de fibra, beber suficiente agua, hacer ejercicio e intentar ir al baño cada día a la misma hora.
Si se trata de un estreñimiento crónico (pasas más de 3 meses con problemas para ir al baño) también es importante poner en práctica hábitos saludables para no acabar dependiendo de los laxantes.
LAS causas DEL ESTREÑIMIENTO
El estreñimiento no siempre ocurre por tomar poca fibra (aunque es un factor importante) ya que puede haber varios aspectos que promuevan conjuntamente su aparición. Conocer todo lo que puede haber tras ello es el primer paso para saber cómo puedes hacerle frente.
- Una dieta inadecuada. En muchos casos lo que está tras el estreñimiento es una alimentación rica en grasas (que inhibe los movimientos gástricos) o que no aporta suficiente fibra (lo que perjudica al tránsito intestinal).
- La hidratación también influye. No tomar suficiente agua puede hacer que el aparato digestivo no esté todo lo lubricado que debería, lo que hace que las heces se endurezcan y, por ello, contribuye a que el esfuerzo al defecar sea todavía mayor.
- El sedentarismo. Para que las heces avancen hasta el recto el intestino debe contraerse. El abdomen también debe hacerlo en el momento de la evacuación. En cambio, hacer ejercicio ayuda tanto a movilizar la musculatura de esta zona y mejorar el tránsito intestinal como a evitar el sobrepeso, que también se relaciona con el estreñimiento.
- Desajustes horarios. Cuando se inhiben las ganas de ir al baño (porque estamos fuera de casa, en el trabajo…) el ano se contrae. Si pospones a menudo ese momento, el ano puede "acostumbrarse" a contraerse en lugar de relajarse (que es lo que debe ocurrir) ante el estímulo de defecar. Además, el hecho de retrasar la evacuación facilita que las heces se endurezcan, lo que dificulta luego su expulsión.
- Determinados fármacos (antiinflamatorios, antitusivos, antiácidos, ansiolíticos, diuréticos…) o suplementos (por ejemplo el hierro) tomados de forma habitual pueden causarlo.
- Enfermedades. La diabetes, el hipotiroidismo, la insuficiencia cardiaca o renal, haber sufrido un ictus o padecer una enfermedad del aparato digestivo pueden favorecer el estreñimiento crónico.
Por qué el estreñimiento afecta más a la mujeres
El estreñimiento afecta al doble de mujeres que de hombres, según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), y las razones son diversas.
- Los vaivenes hormonales, el hecho de atravesar embarazos y partos y las posibles cirugías ginecológicas aumentan el riesgo de estreñimiento.
- Las mujeres son más reacias a ir a WC públicos (lo que las obliga a postergar la evacuación y agrava el problema).
- Sufren más enfermedades crónicas que se tratan con fármacos que tienen el estreñimiento de efecto secundario.