La influencer se medica desde hace tres años por la esclerosis múltiple que sufre
El segundo embarazo de la influencer María Pombo ha vuelto a poner de actualidad un tema de salud: ¿cómo puede afectar la esclerosis múltiple al embarazo?
La madrileña no estaba diagnosticada de esclerosis cuando tuvo a su primer, pero ahora lleva tres años medicándose y lógicamente le asaltaron las dudas al quedarse de nuevo embarazada. Temía que pudiera afectar al embarazo o que sufriera algún brote.
Su neurólogo la tranquilizó al decirle "María, ahora estás completamente cuidada por tu bebé, la mejor medicación es tener un bebé dentro". La esclerosis múltiple no es un riesgo para el feto y el embarazo tampoco empeora la enfermedad sino todo lo contrario, podría aliviar los síntomas durante los meses de gestación.
La influencer se muestra feliz y precavida a la vez: "Los momentos críticos son cuando te quedas embarazada y cuando das a luz. Espero que no me dé ningún brote. Y si me da pues a pasarlo, no hay mucho más. Si te da un brote pueden pasar muchas cosas, que pierdas visión, que te quedes ciega durante unos días, que no sientas el cuerpo, que tengas hormigueo...", ha explicado.
La esclerosis múltiple afecta más a las mujeres
La esclerosis múltiple ocurre principalmente en mujeres (75%) y los primeros síntomas suelen aparecer en la edad fértil, concretamente entre los 20 y los 40 años.
Se trata de una enfermedad neurológica crónica que sucede cuando el sistema inmunitario (que normalmente nos protege) ataca por error a la mielina, la capa que protege las células nerviosas (neuronas). Este daño en la mielina hace que los mensajes entre el cerebro y el cuerpo sean más lentos o se detengan.
Por el momento se desconocen las causas de la esclerosis, también llamada la enfermedad de las mil caras, puesto que puede afectar a diferentes partes del cuerpo y de manera diferente a cada persona.
Qué síntomas provoca la esclerosis múltiple
La esclerosis múltiples es una enfermedad que aparece en forma de brotes y puede variar mucho en cuanto a síntomas, intensidad de los mismos y evolución.
Los síntomas más habituales son:
- Trastornos del habla.
- Falta de coordinación y temblores.
- Problemas de vejiga y problemas intestinales.
- Problemas de visión.
- Problemas de movilidad.
- Dolor, fatiga y mareos.
- Espasmos musculares y sensibilidad al calor.
- Depresión.
- Confusión mental.
- Problemas para dormir.
En los últimos años se ha avanzado en tratamientos que han permitido mejorar el curso de la enfermedad, por eso es difícil predecir si la persona tendrá más o menos brotes o el grado de discapacidad.
Cómo afecta el embarazo a la esclerosis múltiple
Se sabe desde hace tiempo que los factores reproductivos, incluida la producción de hormonas esteroides sexuales y el embarazo, alteran el curso de la enfermedad en la esclerosis múltiple.
Los expertos sugieren que el embarazo podría reducir la sobreactividad anormal del sistema inmunológico que ocurre en la esclerosis múltiple, por lo que podría aliviar los síntomas.
¿El embarazo puede retrasar la aparición de la esclerosis múltiple?
Investigadores de la Universidad de Monash han demostrado que el embarazo puede retrasar hasta tres años la aparición de los primeros síntomas de esclerosis múltiple. Los resultados del estudio se han publicado en JAMA Neurology. Para llegar a esta conclusión, recopilaron datos (sobre la existencia de embarazos y partos, su duración, fecha del parto, lactancia…) de 2557 mujeres con esclerosis múltiple que reciben tratamiento en hospitales de Australia y la República Checa.
Además de analizar si el embarazo tiene algún impacto en el inicio de los síntomas de la esclerosis múltiple, también se evaluó si un mayor número de embarazos y partos se asocia a una aparición más tardía de la enfermedad.
El análisis de los datos determinó que en aquellas mujeres que tuvieron embarazos y partos, los síntomas de la esclerosis múltiple empezaron más tarde que en las que nunca habían estado embarazadas.
De media, los síntomas aparecieron 3,3 años más tarde. Un retraso similar en la aparición de los primeros síntomas se observó en las mujeres que habían dado a luz en comparación con las que nunca habían dado a luz. En este caso, la media de años de retraso era de 3,4.
“En la actualidad, no sabemos exactamente cómo el embarazo frena el desarrollo de la esclerosis, pero creemos que tiene que ver con las alteraciones realizadas en el ADN de la mujer”, indica la doctora la doctora Vilija Jokubaitis, una de las autoras del estudio.