El azúcar refinado es uno de los enemigos de nuestra salud. No debería serlo, porque a nadie le amarga un dulce. Se ha convertido en problema a partir del momento en que la industria alimentaria vio que era la mejor manera de atraer a los consumidores hacia sus productos.
Hoy encontramos azúcar, y en grandes cantidades, en todo tipo de alimentos. Y lo peor es que muchas veces se trata de azúcar escondida. Alimentos que no pensabas que tendrían azúcar, como salsas o aperitivos, llevan. Los dulces, para poder publicitarse con un tanto por ciento bajo en azúcar, la cuelan añadiendo otros tipos de azúcar, como dextrosa o sacarosa.
Por eso, hemos de intentar no añadir más azúcar a nuestra dieta y frenar la que podemos añadir nosotros a los cafés e infusiones. La farmacéutica María de los Ángeles García, conocida popularmente como Boticaria García, propone una saludable alternativa en esta cruzada.
Tres razones para pasarte a la canela
“¿Quieres quitarte el azúcar del café y no sabes cómo?”, plantea en un reciente vídeo en redes sociales. Su apuesta es una de las especias más populares: la canela. Boticaria García te da tres razones para pasarte a ella y quitar el azucarero de delante.
- Los edulcorantes artificiales son seguros en cantidades moderadas, pero podrían alterar la microbiota. “A diferencia de ellos, la canela tiene compuestos bioactivos, como el cinamaldehído, que tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.”
- A diferencia del azúcar, la canela da sabor dulce sin aumentar los picos de glucosa en sangre.
- “No solo no aumenta los picos de glucosa, sino que puede mejorar la sensibilidad a la insulina y ayudar también a regular esos niveles de glucosa”, añade. La farmacéutica, no obstante, advierte que se ha de investigar más este punto.
Su comentario se basa en un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition. El trabajo confirma el beneficio en personas con sobrepeso o prediabéticas. Lo que ocurre es que ya había otras investigaciones previas con resultados menos evidentes.
Otras especias recomendables
No es la única opción que tenemos. En una intervención en televisión, Boticaria García planteaba recurrir a otras especias que también tienen un sabor dulzón. Las otras dos más habituales que pueden reducir el consumo de azúcar son la vainilla y la nuez moscada.
Se podrá argumentar que es un dulzor menos intenso. Precisamente ese es uno de los objetivos que tenemos que plantearnos. El uso y abuso del azúcar ha hecho que nuestro paladar se adapte y exija cada vez mayor dulzor para apreciarlo.
Debemos revertir esta tendencia. Acostumbrarnos a un dulzor más sutil. Puede parecer tarea imposible en un primer momento, aunque ya verás que poco a poco apreciarás el sabor y endulzaremos de manera más saludable.
Otras maneras de endulzar, como es sustituir el azúcar refinado por frutas muy dulces como los dátiles no es aconsejable. Boticaria García advierte que tienen una alta proporción de azúcar. Azúcar de la fruta, que es más sana, pero azúcar y que también crea picos de glucosa. El contenido en fibra del dátil es bajo en relación al contenido en azúcar.
Por qué no convienen los edulcorantes artificiales
La otra opción más extendida al azúcar son los edulcorantes artificiales. En su momento, en la segunda mitad del siglo XX, se extendió su uso como la gran solución al exceso de azúcar y el aumento de los casos de sobrepeso.
Hoy la Organización Mundial de la Salud ha desaconsejado explícitamente la utilización de edulcorantes artificiales como método de controlar el peso y el consumo de calorías. Los estudios sobre estos edulcorantes no son concluyentes.
No es cierto que provoquen cáncer, como se ha dicho. Lo que sí se ha confirmado científicamente es que afectan a la microbiota, las bacterias beneficiosas que tenemos en el intestino, como advierte Boticaria García. Se han notificado casos de problemas digestivos, como diarreas, por un uso excesivo.
Un consumo pequeño o esporádico no supone ningún problema. Por tanto, ir alternando edulcorantes y azúcar no es malo para reducir el consumo de esta última.
Lo mejor, no obstante, es intentar introducir cada vez más las especias dulces como opción y acostumbrarnos también al sabor natural ya dulce de algunos alimentos. ¿Has probado las fresas solas, sin añadirles azúcar o nata azucarada? Si lo haces un par de veces, te acabas acostumbrando y aprecias más su sabor.