¿Habías oído hablar del síndrome de la boca ardiente? Se trata de una afección un tanto desconocida pero que afecta aproximadamente a 1 de cada 10 españoles, sobre todo a mujeres en edad posmenopáusica, cuando llega a afectar al 30% de ellas. No es un nada grave pero sí genera importantes molestias.
No es nada grave pero sí es algo muy molesto
Por ello, es bueno conocer qué es este síndrome para poder ir al médico y que seguir el tratamiento más adecuado. Es cierto que este trastorno es muy confuso y no tiene un origen claro. Por eso, más que un tratamiento concreto a seguir, existen múltiples consejos que calman los síntomas.
cuál es la causa de la "boca ardiente"
La Dra. Regina Izquierdo, de la junta directiva de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) resuelve las dudas sobre este tema. Según nos expone esta especialista:
- El síndrome de boca ardiente (SBA) es un desorden crónico que causa una sensación dolorosa de ardor, picor, escozor o quemazón sobre alguna zona de la mucosa oral sin que se observen alteraciones o lesiones asociadas y sin que existan en pruebas de laboratorio se halle nada extraño.
- La zona más afectada suele ser la lengua, seguida por labio inferior, paladar y encías, aunque hay muchos pacientes que sienten molestias en toda la boca.
En realidad se desconocen las causas que llevan a este trastorno, aunque todos los estudios hacen pensar que tiene un origen multifactorial, es decir, interactúan factores psicológicos y sistémicos con alteraciones neurológicas.
- Los componentes de algunos dentífricos o de algunos medicamentos podrían estar detrás de esta reacción.
- Hay casos en que se tiende a pensar que una falta de ciertas vitaminas o nutrientes, podría desencadenarlo.
Se desconocen las causas pero el estrés y la depresión podrían ser detonantes
- En general, se han observado algunos trastornos asociados como la depresión, seguido por el estrés o la ansiedad, situaciones que pueden explicar los síntomas de casi el 50% de los afectados.
¿los síntomas de este síndrome
Los síntomas más comunes que nos avisan de esta afección son varios, pero el principal es la sensación de ardor o escozor en la mucosa oral y en la mayoría de los casos los afectados aseguran que es "intolerable".
Los otros signos que nos avisan de este síndrome, según expone la Dra. Izquierdo, son los siguientes:
- En muchas ocasiones, se acompaña de sequedad bucal y/o alteraciones en el sentido del gusto, que puede estar disminuido o con sensación de sabores raros “como a algo metálico”.
- También se asocia a la “disestesia”, que es una sensación extraña de aspereza, presencia de sustancia pegajosa o pequeñas erosiones en la mucosa.
- También es frecuente la hiperactividad de labios y/o lengua o la sensación de adormecimiento en los labios.
- La punta de la lengua y los bordes suelen ser las zonas más sensibles en esta situación.
"El síndrome de la boca ardiente reduce significativamente la calidad de vida del afectado", afirma la doctora. Por ello, es importante, ante estos síntomas, acudir a nuestro dentista de confianza que hará una exploración bucal exhaustiva con el fin de descartar otras patologías locales.
El principal síntoma es una sensación de ardor o escozor en la mucosa oral "intolerable"
También, añade la especialista, es aconsejable pedir una analítica sanguínea para comprobar la existencia de una anemia o de hiperglucemia por una diabetes (en ocasiones, puede que aún no diagnosticada) que en ocasiones pueden también estar relacionadas con esta sensación molesta.
cómo es el tratamiento
Al ser un trastorno de origen confuso, es importante abordarlo desde varias perspectivas. Según nos indica la Dra. Izquierdo, en caso de existir un componente psicopatológico importante habrá que derivar al paciente al especialista para valorar el tratamiento de la ansiedad o la depresión.
- Pero en todo caso, hay que evitar y tratar aquellas situaciones irritativas sobre labios o lengua como son dientes rotos, desgastados o con cúspides muy prominentes así como las áreas de excesiva presión de prótesis bucales movibles.
Al desconocerse la causa del trastorno, no existe un tratamiento específico para paliarlo
No existe un tratamiento específico para tratar este síndrome, ya que no existe un origen claro o un desencadenante específico y conocido, pero es importante tener en cuenta estos tres aspectos que nos expone la Dra. Izquierdo:
- Los casos de desaparición espontánea de las molestias son muy poco frecuentes y en la mayoría de los casos la remisión suele ser parcial.
- A día de hoy no existe un protocolo terápeutico con resultados eficaces.
- Dar al paciente toda la información y tranquilizarle evita, en parte, que estas molestias le generen aún más ansiedad, ya que en múltiples ocasiones estos pacientes acuden a las consultas con temor a un posible diagnóstico de “cáncer oral”.
Más vale prevenir
Por otro lado, y según una información publicada en la web oficial del Colegio Oficial de Dentistas de Guipúzcoa existen una serie de consejos y recomendaciones para tratar y mejorar la sintomatología de este trastorno.
- Eliminar todo elemento externo que pueda provocar alergias de contacto en la boca.
- Controlar malos hábitos orales. Por ejemplo, el bruxismo, morderse los labios, las mejillas, la lengua o las uñas.
- Es necesario (como hemos comentado ya más arriba), "solucionar deficiencias vitamínicas y minerales y emplear sustitutos salivales en los casos en los que este problema está asociado o va acompañado de una falta de saliva", tal y como afirman los odontólogos del colegio Oficial de Gipuzcua.