Si a la mayoría de nosotros nos pidieran que nos palpásemos los ganglios, lo más probable es que respondiésemos con el acto reflejo de llevarnos la mano bajo la mandíbula. Porque casi todos sabemos que están ahí y que también los hay en las axilas o las ingles, aunque en realidad los tenemos repartidos por todo el cuerpo.
- Los identificamos más en determinadas zonas porque es donde son más fáciles de palpar, pero también podemos encontrar ganglios cerca del codo o detrás de las rodillas.
Asimismo, solemos tener presente que a veces se “hinchan” pero no siempre conocemos por qué o si eso puede resultar peligroso.
cuál es la función de los ganglios
Los ganglios forman parte del sistema linfático y podrían definirse como una especie de pequeños cubículos en los que viven unos huéspedes muy especiales y útiles: los linfocitos y los macrófagos.
- Los linfocitos son un tipo de glóbulos blancos capaces de detectar sustancias que pueden dañarnos (virus, bacterias, hongos, células que están alteradas como ocurre con las cancerígenas...) y de atraparlas.
Los ganglios no suelen medir más de 1 cm. Los de la ingle, que llegan a los 2 cm, y los de cerca del codo, de menos de ½ cm, son la excepción
- Los macrófagos, por su parte, se encargan de destruir esas sustancias dañinas.
La inflamación de los ganglios se debe a la activación de este proceso, básico para que nuestro sistema inmune pueda defendernos con eficacia.
Que se inflamen es buena señal
- Que se inflamen (lo que se conoce como adenopatía) indica que nuestro sistema inmunitario funciona bien y que está intentando combatir algún tipo de infección que puede estar causada por bacterias (como la tuberculosis), virus (como la gripe o la mononucleosis infecciosa), hongos o parásitos. Si lo detectas, no te asustes porque, como has visto, es una reacción natural para aislar y derrotar a los microorganismos dañinos
Que se inflamen indica que nuestras defensas funcionan correctamente y que están activas
- Cuando un ganglio está inflamado, suele moverse un poco al tocarlo y puede doler ligeramente cuando la inflamación se debe a una infección local.
Pueden inflamarse muchos a la vez
Cuando sucede se habla de adenopatías generalizadas y suele producirse ante enfermedades de las llamadas sistémicas (afectan a todos los componentes de un mismo sistema) que pueden ser benignas y estar producidas por virus.
A veces pueden indicar algo grave
Aunque sucede con bastante menos frecuencia, a veces las adenopatías se producen por causas distintas a la infección (que también podría ser grave).
- En ocasiones son ciertos medicamentos o una vacuna los que las generan. Pero también pueden ser una respuesta a enfermedades del sistema inmunitario (artritis reumatoide, lupus…) y, en algunas ocasiones, responden a la presencia de un tumor.
Qué hacer para bajar la hinchazón
No es necesario medicarse con este objetivo. Lo que debe hacerse en realidad es tratar la causa que origina la adenopatía, es decir, la enfermedad de base que está provocando que esa inflamación se produzca, no el ganglio en sí mismo.
- Ten en cuenta que, aunque muchas veces sí que vuelve a sus dimensiones habituales, otras el ganglio puede continuar inflamado incluso algunas semanas después de que la infección ya haya sido superada.
Cuando el ganglio inflamado duele, aplicar una compresa caliente sobre él puede ayudar a que te sientas mejor
- Lo que hay que vigilar es que vaya disminuyendo de tamaño progresivamente y que, en ningún caso, crezca ni se acompañe de otros signos de alarma como dolor, fiebre...
Cuándo hay que preocuparse
Si está caliente y duele hay que ir al médico
Son dos señales de que la inflamación del ganglio puede responder a algo grave. Pero hay otras más:
- Que tenga un color rojizo.
- Que no deje de crecer.
- Que sea duro.
- De contorno irregular.
- Y no pueda moverse con el dedo.
También debe alertar que su presencia se acompañe de otros síntomas como, por ejemplo:
- Dolor en las articulaciones.
- Fiebre (más de 38º C).
- Sudoración.
- Pérdida de peso.
- Cansancio excesivo…
Si alcanza un gran tamaño
Los ganglios tienen diferentes medidas que pueden variar a lo largo de la vida.
- Sin embargo, los que son mayores de 2 centímetros de diámetro hay que controlarlos porque pueden no responder a un proceso inflamatorio benigno.
Que no deje de crecer, que se ponga duro o que duela son señales de que puede haber algo serio
- Si un ganglio alcanza más de 4 centímetros hay que estudiarlo lo antes posible puesto que las probabilidades de que haya una enfermedad seria detrás de una inflamación tan grande son bastante altas.
A mayor edad, más complicaciones
Los ganglios inflamados en adultos que tienen más de 50 años, sobre todo en el caso de los hombres más que en las mujeres, hacen pensar en procesos tumorales antes que en infecciosos por lo que es necesario consultar con el médico siempre que se inflame uno.
No siempre se perciben las señales de alarma
Hay que tener en cuenta que en el cuerpo tenemos alrededor de 600 ganglios (intercomunicados entre sí dando lugar a grupos que juntos forman parte del sistema linfático) y muchos ni siquiera pueden palparse con los dedos.
Estos se consideran “ganglios ocultos”, ya que solo se ven mediante la realización de determinadas pruebas médicas.
- Los ganglios ocultos son, por ejemplo, los del abdomen, el mediastino (en el centro del tórax), los poplíteos (que se ocupan del drenaje linfático de rodilla, las piernas y los pies)...
- Los más fáciles de palpar son los que se encuentran situados debajo de la mandíbula y la barbilla, los laterales del cuello, los localizados en la parte posterior de la cabeza (en la nuca o cerca de las orejas) o en la parte superior de las clavículas y los de las ingles, las axilas y los codos.
Algunos hay que eliminarlos como prevención
Se usa, a veces, como tratamiento en ciertos tipos de de cáncer. Los ganglios se unen formando cadenas distribuidas por todo el cuerpo. El primero es el ganglio centinela y se analiza para conocer el riesgo de que un tumor se propague a otras zonas (metástasis).
Extirparlos en caso de un cáncer, puede ayudar a que este no se extienda
- ¿Cómo actúan? Las células malignas pueden salir de un tumor, llegar al ganglio centinela más cercano y, a través de la cadena, ir hacia otra parte del cuerpo. Al extirparse, se evita esto.
- Contra el tumor de mama. El estudio del ganglio centinela se realiza sobre todo en este tipo de cáncer: se halla en la axila y su eliminación evita en muchos casos la extirpación del pecho.